Eulogio Guadarrama Márquez, ayudante de la comunidad, mencionó que el tema ya se ha planteado a la presidenta municipal electa Luz Dary Quevedo, quien se ha comprometido a priorizar este tema por la seguridad de las familias y de los ocupantes de inmuebles públicos, principalmente de la Escuela Primaria José María Morelos y Pavón, ya que en reiteradas ocasiones se ha inundado por el desbordamiento del cauce del río.
Recordó que desde hace dos administraciones que se reblandeció el muro de contención por la creciente del río y se complicó, tras los daños que causaron los fenómenos climáticos Ingrid y Manuel (2013). Sin embargo, ninguna autoridad ni municipal ni estatal destinó recursos para realizar trabajos que garantizaran la seguridad de quienes se ubican en este punto, considerado como de riesgo.
“Durante la administración anterior supuestamente se destinó un recurso económico, pero finalmente no hicieron nada y querían dar por realizada la obra. Con esta administración que encabezó Alberto Martínez González no le dio importancia al tema, se limitó primero a prometer, más tarde a justificar la falta de recursos económicos y finalmente no hizo nada por rehabilitar el muro de contención y garantizar la seguridad de las familias que nos ubicamos en este punto que está considerado como de riego. Ya nos hemos inundado en dos ocasiones, después de que se colapsó el muro de contención y nadie ha hecho nada por garantizar la seguridad”, insistió Eulogio Guadarrama.
Agregó que incluso por parte de dependencias estatales no se ha tenido el apoyo. “Hemos recurrido a la Secretaría de Obras Públicas del estado, a la Comisión Nacional del Agua, ellos nos prometen que nos apoyarán con ese muro de contención, pero a la fecha no hemos visto nada, no hay respuesta, todo queda en sus buenas intenciones”, dijo.
Mencionó que incluso nuevamente el año pasado en el mes de octubre se volvió a sufrir los estragos de la naturaleza, a pesar de que aseguraron que se realizaron trabajos preventivos en el cauce del río. "El año pasado sufrimos otra vez una inundación, adentro de las casas el agua llegó a un nivel de metro y medio, además se vieron afectadas la biblioteca, ayudantía, capilla, la cancha y la escuela primaria de la comunidad”, explicó.
El proyecto requiere la construcción de una longitud de 170 metros cuadrados, para evitar que una vez más se desborde el río en la creciente.
Finalmente, refirió que el riesgo es latente durante la temporada de lluvias. En los últimos años la incertidumbre es mayor debido al daño que ha sufrido el muro de contención existente, el cual presenta una fractura de aproximadamente cuatro metros.