En conferencia de prensa, para dar a conocer precisamente los detalles de la marcha, ofrecida por el obispo de Cuernavaca, monseñor Castro Castro; el párroco de Jojutla, Rogelio Sánchez Pèrez, y el de Tilzapotla, Josè Guadalupe Popoca Sotelo, en este lugar, a pregunta expresa, respondieron que los municipios de Amacuzac y Puente de Ixtla, en la regiòn sur, son los territorios más afectados por la delincuencia organizada.
“Amacuzac y Puente de Ixtla son los más afectados de esta zona sur. En un tercer lugar estaría Jojutla, de acuerdo con los reportes que tenemos. Amacuzac ha sido sistemáticamente golpeada por la delincuencia organizada, junto con Puente de Ixtla, con secuestros, homicidios y extorsión, que es como el pan de cada día”, apuntó Sánchez Pérez.
También reconocieron que no es la primera marcha por la paz que se han realizado y aunque siguen los homicidios y muchas víctimas de la violencia, destacaron que se trata de crear conciencia de unidad, y los resultados se darán al tiempo.
“No podemos quedarnos cruzados y que el crimen organizado haga de las suyas, creo que es mucho mejor realizar esa marcha que quedase con los brazos cruzados. Es mucho mejor manifestar ese deseo de paz, que quedarse con los brazos cruzados”.
Dijo que el miedo paraliza, y comenzar a expresarse, como en esta marcha, es parte de quitar el miedo. “El miedo paraliza. Cuando hacemos esto, estamos quitando el miedo y poco a poco se verán los frutos. Esto ayuda, es mucho mejor hacerlo, que no. Vamos sembrando. Los niños, jóvenes están viendo que nos estamos preocupando y queremos un ambiente mejor para ellos, y que en su conciencia, cada quien diga que sin violencia, sin insultos, hizo lo que tenía que hacer”.
Afirmó que las marchas, en algún momento, tendrán su consecuencia, cuándo y cómo Dios quiera, pero ahora, el crimen organizado sabe que no es mayoría”.
Castro Castro, dijo que estas marchas dan unidad y se hace oración y el Señor sabe cómo responder en beneficio de su pueblo, y muchas veces no es a la primera.
Por su parte, el párroco José Guadalupe, señaló que esta situación ayuda para entender que existe la necesidad de ser solidarios y estar unidos, pues hay veces en que nadie ayuda a víctimas que han sido objeto de un delito. “Constantemente en Morelos nos dicen que no pasa nada, y eso es mentira. Con esta marcha por la paz, hay que expresar que sí pasa, y pasa mucho”.
El párroco Rogelio Sánchez Pèrez, de Jojutla, reconoció que podría haber desilusión en algunas personas por falta de resultados inmediatos, pero delante de toda esta adversidad, “cuando estamos convencidos de la gracia de Dios, ésta se va fortaleciendo, para que la súplica sea más fuerte y más constante. Sí hay cansancio y desilución sicológicamente, pero en el fortalecimiento de la fe hay una esperanza que nos anima a seguir marchando. El mundo no se hizo en un dìa. Hay todo un proceso, tenemos que aprender a genera una consulta de la paz”.
En cuanto a la marcha, llamada “caminemos por la paz”, Castro Castro, confirmò que se realizará en Cuernavaca, el próximo 23 de mayo, a las 8:30 horas, que partirá de cuatro puntos distintos para confluir en el zócaloy a la que se espera lleguen más de diez mil morelenses. Recomendò vestir de blanco.