De manera anónima, por temor a represalias, los uniformados aseguraron que durante la administración en repetidas ocasiones externaron sus demandas al gobierno municipal, ya que entre las principales necesidades estaba el incremento de parque vehicular, la dotación de uniformes y equipamiento, pero principalmente el incremento salarial y seguro de vida.
Refirieron que son 42 elementos los que conforman la corporación –entre oficiales de Seguridad Pública, Tránsito municipal y Rescate–, quienes durante la actual administración se han mantenido con el mismo sueldo, sin obtener respuesta favorable a sus demandas.
Mencionaron que en promedio, los policías rasos de la corporación ganan entre mil 800 y dos mil 500 pesos quincenales, mientras que los elementos de municipios como Puente de Ixtla o Tlaltizapán ganan entre dos mil 800 y tres mil pesos a la quincena.
Insistieron en que el alcalde se comprometió a gestionar los recursos necesarios para lograr la nivelación de pagos entre los elementos y hoy en día –dijeron– ya se va y no ha cumplido. “A pesar de que en nuestra labor arriesgamos la vida y tenemos responsabilidades en caso de cualquier omisión, no contamos con un salario digno. Toda la administración nos llevó igual el presidente, que lo estaban considerando. No tenemos ni seguro de vida, ni ninguna otra garantía”, aseveraron.