El alcalde de Tlaltizapán, Ennio Pérez Amador, manifestó su preocupación porque aún no reabren el tiradero, pero anticipó que el propietario del lugar está tramitando su operación de nueva cuenta.
Señaló que realizan un servicio de recolección parcial que están llevando a Cuautla y dijo desconocer cuánto gastan por este servicio; pero “no es mucho”, porque llevan uno o dos camiones diarios hacia allá.
Expuso que si no hay acuerdo, seguirán recogiendo una cantidad mínima de basura, “la que más urja”, hasta que se reabra el tiradero particular.
Por su parte, el encargado de la Dirección de Gobernación del Ayuntamiento de Tlaquiltenango, Lorenzo García Gaytán, reconoció que no cuentan con un lugar donde depositar los desechos y dijo desconocer quién envió los tres camiones recolectores al basurero de Jojutla, que fueron detenidos este lunes por los vecinos, antes de llegar a su destino.
“Hay personas que conocemos ahí y nos hicieron el favor de entregarnos los camiones.” Admitió que alguna autoridad de Tlaquiltenango debió enviar los camiones para allá, pero insistió en que desconoce quién y los términos bajo los que se hizo.
“El cierre del basurero nos está creando un conflicto social a toda la ciudadanía de Tlaquiltenango. Vamos (a) empezar a gestionar dónde tirar, si es aquí, en Yautepec, Cuautla o Yacaplixtla para que ya empecemos a dar una limpia en el municipio, porque en toda la avenida principal y a bordo de carretera están las bolsas de basura y asimismo los camiones ya tienen un olor muy fétido, igual en el parque, frente al mercado.”
Por su parte, el secretario municipal del mismo lugar, Eduardo Morales Orfaly, señaló que ayer mismo acudiría con Pedro Juárez, subsecretario de la Comisión Estatal del Agua y Medio Ambiente (CEAMA) para que le informara acerca de los lugares donde se pueda depositar la basura.
Recordó que el basurero de Tlaquiltenango fue cerrado hace apenas unas semanas y actualmente se trabaja en su remediación.
Comentó que se hizo un convenio con el tiradero controlado de Tlaltizapán para depositar ahí la basura, a un costo de 110 pesos por tonelada; sin embargo, y ante la situación que se puede volver de emergencia, solicitarán a la CEAMA que dé opciones, pues los rellenos sanitarios disponibles están lejos, aunque, de ser necesario, enviarían la basura a Cuautla.
“Somos respetuosos de las disposiciones de las autoridades, tanto estatales como federales, pero la afectación se da y ya que clausuran basureros, nos deben dar opciones para depositar de la mejor manera nuestros residuos sólidos.”