Como se recordará, habitantes del citado conjunto habitacional han denunciado reiteradamente que no están municipalizados y no ha habido interés ni de los fraccionadores ni del Ayuntamiento de regularizar la situación, de modo que los servicios de recolección de basura y agua, entre otros, son deficientes mientras que la conexión al drenaje municipal no existe.
El año pasado, el comité de vecinos de la etapa II manifestó su preocupación porque, en particular, el no estar conectados al drenaje sino desalojar las aguas negras mediante un canal que las lleva al río Apatlaco, supone riesgo de clausura de las descargas de parte de las autoridades ambientales. Además, instaló incluso una lona en la entrada del fraccionamiento para advertir a los posibles compradores de casas.
Las autoridades municipales se han negado a informar acerca de la falta de conexión al drenaje municipal. En su momento, Omar Loza Montiel, subdirector de Obras Públicas, dijo desconocer la situación de las descargas de aguas negras directas al río.
El mes pasado, Gabriela Hernández Ortega, vecina del lugar, reiteró que el drenaje (de la segunda etapa) no está conectado a la red municipal y aunque la empresa intentó conectarse por la avenida Juárez, al final no se le permitió, por lo que el agua se desaloja hasta un canal y se descarga en una barranca que va al río Apatlaco, contaminando las aguas.
Entrevistado al respecto, el titular de la CEAMA, Fernando Bahena Vera, dijo no contar con información al respecto, pero además que no es de su competencia.
“No tengo el dato, pero lo retomamos; y tendría que ser ahí la Comisión Nacional del Agua (Conagua) la directamente responsable de las descargas que se den al río para en su caso sancionar. La empresa (constructora) está obligada a tener, en primer lugar, una factibilidad tanto de agua como de descarga; esta factibilidad implicaría el que tuvieran un sistema propio o conectarlo a la red municipal o cualquiera de las dos cosas; y la factibilidad implica concretarlo con los permisos correspondientes. No conozco si es un sistema propio el que está dañado, que tendría en consecuencia que rehabilitarse, o es una conexión, que no se llevó a cabo de manera correcta a la red municipal. Habría que revisarse”.
–¿Se presume que si el conjunto habitacional está operando, ¿satisfizo todos estos requisitos?
–Así es, sobre todo cuando la empresa que desarrolló entrega la obra o la municipalizan. Simplemente, cuando le dan los oficios de ocupación es porque está debidamente terminada toda esta infraestructura que tiene que ver con la dotación de agua y/o el tratamiento de aguas residuales, respondió.