José Antonio Silva Camacho, secretario general de la Unión de Tablajeros de Jojutla, comentó que luego de la promesa del alcalde Enrique Retiguín de remodelar el rastro y tenerlo listo el 25 de septiembre, no han tenido ningún contacto con el municipio.
“Seguimos en lo mismo, el señor (presidente) había propuesto entregarlo el 25 de septiembre, pero al parecer, vinieron las autoridades correspondientes y no estaba totalmente cumpliendo con los requisitos que le pedían; le dieron otros 15 días, pero esos 15 días ya pasaron y aún no sabemos nada”, apuntó.
Silva Camacho expuso que hasta ayer no han tenido reunión alguna con las autoridades municipales y están a la espera de noticias.
En relación con la aportación económica que hicieron para la rehabilitación del inmueble, reconoció que sólo aportaron 100 mil pesos –habían ofrecido 200 mil– los cuales incluso les podrían ser devueltos porque los dieron para que no les incrementaran los costos, pero el gobierno no acepta esta condición.
“Se habló de que íbamos a dar la mitad del costo; si costaba 300 mil pesos, daríamos 150 mil; si costaba los 400 (mil), 200 mil y así. O sea, se dio la primera parte (de 100 mil pesos, pues el costo se estimó en 400 mil), pero algunos compañeros se inconformaron porque consideraron que era mucho dinero para lo que se estaba haciendo. Ahorita prácticamente ya está terminado, pero en realidad, pues nosotros no sabemos si realmente se gastó eso o se gastó menos, no sabemos.”
El secretario de los tablajeros dijo que el dinero lo aportaron para que no les incrementaran el costo del degüello hasta que termine la actual administración, a lo que el gobierno no estuvo de acuerdo, por lo que “al parecer”, les van a devolver el dinero, pero aún no saben nada de manera oficial.
Añadió que actualmente están llevando el ganado a matar al rastro de Zacatepec, pero eso incrementa los costos.
“¿Todavía pueden aguantar o ya hay desesperación?”, se le preguntó.
“Está bien, nada más que yo creo que el señor (presidente) ha de estar esperando que se llegue Navidad, (fechas) en que se mata un poco más, para aprovechar, yo creo, el momento y decir ‘les cuesta tanto’ y pues lo tiene uno que hacer porque hay la necesidad de matar”, concluyó.
Este reportero acudió al rastro municipal para conocer la posición del municipio, pero no se encontró al administrador.