“Hay un problema con esta gente del fideicomiso de braceros, que por una razón u otra quedó, la gente, fuera de esta segunda convocatoria; no está en las listas que salieron apenas en el mes de marzo, en las que hubo 36-38 personas del estado de Morelos”, apuntó.

Es un asunto viejo, prosiguió, en el que el gobierno americano ya había depositado el dinero al gobierno mexicano para que se le devolviera a la gente que fue a trabajar a Estados Unidos. Recientemente, salió otra lista de ex trabajadores a quienes se pagará, pero muchos no pudieron meter sus documentos.

Señaló que alrededor de 15 personas de la región se han acercado a la fundación que representa para recibir apoyo y asesoría para recuperar su dinero.

“Se requiere que los afectados acudan al Congreso del Estado o de la Unión a hablar con los diputados para que se haga un punto de acuerdo y se haga una tercera convocatoria para recibir los documentos de esta gente”.

Dijo que se trata de gente que se dedicó a la pizca de algodón, de la naranja, del limón, u otros.

Refirió que el pasado mes de febrero cinco mil de estos extrabajadores de todo el país recibieron la aprobación del fideicomiso del fondo social para ex trabajadores migratorios, para que se les entregara 34 mil pesos, a cada uno.

De ésos, sólo 38 son del estado de Morelos, de los cuales sólo doce son de la zona sur. Ellos son Candelario Solano, de Amacuzac; Modesto Abarca, de Zacatepec; Juan Rebollar, Enrique Menez, Salomón López, Pedro Hernández y Agustín Mena, de Puente de Ixtla; Enrique Landa, de Jojutla; Nereo Aguirre, de Tlaquiltenango; Raúl Guadarrama, de Coatlán del Río, y Esteban Aguilar, de Tlaltizapán.

Esta repartición no alcanza a todos los trabajadores que consideran tienen derecho a este apoyo, por lo que dijo que recibirán documentación de los ex braceros para buscar que les otorguen este recurso.

Bello Ocampo aprovechó para informar que la fundación apoyará en la operación de un joven de Yautepec, que reside en Portland, Oregon, que requiere de un transplante de riñón que no se pudo practicar en los Estados Unidos porque carece de documentación. El órgano se lo donará su hermano, aquí en el estado de Morelos. Se trata de Jackson Suárez Lara, que de hecho ya está en Cuernavaca en el hospital Parres, dijo.

“Puede ser que este muchacho sea el primero al que se le practica un trasplante de riñón en el hospital Parres de Cuernavaca. El donante, que es su hermano, sí está legal en Estados Unidos, en la Marina, y pedirá un permiso para que venga a donar su riñón”.