Durante la zafra se contagiaron cinco trabajadores de la fábrica.

Zacatepec.- El secretario general de la sección 72 del sindicato nacional azucarero, José Barrera García, confirmó que actualmente hay tres trabajadores del Ingenio Emiliano Zapata (IEZ) en cuarentena, con sospecha de haber contraído covid-19.

Comentó que los trabajos de reparación de la fábrica comenzaron la semana pasada y actualmente han detectado a tres obreros con síntomas de esa enfermedad.

Dijo que al inicio de los trabajos se estableció una comisión de crisis, en la que se establecieron los protocolos de acción para el reingreso a la reparación.

Aseguró que aunque realizan vigilancia y monitoreo constantes para detectar cualquier problema, ya tienen los tres primeros casos con síntomas parecidos a ese padecimiento.

“Al día de hoy tenemos tres casos nuevos que no están confirmados; los está valorando el área médica porque tienen alguna sintomatología. Si es necesario, se les enviaría a hacer una prueba a un laboratorio particular. Actualmente están en sus casas, en cuarentena”, detalló.

Barrera García comentó que durante el periodo de zafra reportaron cinco casos confirmados de covid-19, cuyos pacientes ya se recuperaron, pero se les hará nuevamente la prueba.

Reconoció que no cuentan con cubrebocas N95, pero esto se debe a la escasez del producto.

“Hay inexistencia de estos cubrebocas, pero en estos días tiene que llegar una entrega que hizo la empresa”, aseguró.

Sostuvo que cuentan con las medidas sanitarias necesarias en la fábrica de azúcar, pues desde que llegan hay toma de temperatura, lavado de manos y hay cuatro túneles desinfectantes en el interior. Además, se le entrega a cada trabajador de forma personal un dispensador en spray de gel antibacterial.

Sin embargo, admitió que no todos los obreros respetan las medidas sanitarias.

“Es complicado porque cuando salen de trabajar, los compañeros se quitan el cubrebocas inmediatamente. Eso complica mucho, pues si no somos autorresponsables (sic), no podemos garantizar que estén saludables. Dentro de la fábrica, su obligación es tener todo el día el cubrebocas y tenemos personas y cuadrillas que vigilan que así se haga”, explicó.

Reconoció que la esposa de un obrero le reclamó esta semana porque su marido resultó con sospecha de la multicitada enfermedad y aseguró que lo contrajo en el ingenio, pero “es complicado controlar a los trabajadores una vez que salen de la empresa”.