No toda la población atiende las medidas por la emergencia sanitaria.

Jojutla.- A pesar de la insistencia de que la población se mantenga en casa y evite salir lo menos posible, en esta ciudad se mantiene relativamente normal el flujo de personas y automóviles en las calles.

En un recorrido realizado por la avenida principal, este jueves, se pudo observar que ancianos, mujeres, parejas y hasta familias con niños transitaban por la vía pública.

Comerciantes entrevistados declararon que las ventas han bajado aún más, pues ya de por sí después del sismo del 19 de septiembre de 2017 no se han repuesto.

En la calle también hay vendedores, algunos de ellos con cubrebocas, guantes y gel para lavarse las manos, pero hay otros que no siguen ningún tipo de medida.

Más aún, comerciantes de la temporada de Semana Santa dijeron que esta situación los tomó desprevenidos, pues ya habían comprado la mercancía y ahora se enfrentan a una situación difícil.

Un hombre de 90 años que vendía canastas dijo que no podía quedarse en casa porque no tiene quien lo ayude.

El transporte público también resiente la ausencia de pasajeros. No salen las cuentas, pero seguirán trabajando todo lo que dure esta situación, dijo un chofer.

Personas entrevistadas tuvieron versiones encontradas. Mientras algunas decían que debemos cuidarnos y salir solo para lo indispensable, muchas dijeron que no toman precauciones y si “nos va a tocar, nos va a tocar”.

Pudo verse también a parejas jóvenes con sus niños e incluso bebés, prácticamente pasear o ir de compras en la avenida principal.

Algunas tiendas de ropa y otros artículos estaban cerradas y con letreros en sus puertas anunciando su decisión y ofreciendo una dirección virtual, pero otras, sin importar los artículos que venden, estaban abiertas normalmente.

En general, el tráfico vehicular y peatonal sí bajó, pero no tanto para que se sienta un ambiente de cuidado y de emergencia sanitaria.