Ahora fueron los padres de familia los que tomaron el plantel.
Tlaquiltenango.- Aunque maestros de la Secundaria “Otilio Montaño” de este municipio habían llegado a un acuerdo para liberar el plantel –que fue tomado este martes–, ahora fueron los maestros quienes se inconformaron y cerraron las instalaciones, el miércoles.
Como se recordará, profesores inconformes con la directora, Mirna Alejandra Zúñiga, por presuntas irregularidades, tomaron la escuela este martes en demanda de su salida. Con la intervención de las autoridades educativas, llegaron al acuerdo de que se iniciaría una investigación para confirmar las acusaciones y determinar lo conducente. Mientras, ella no entraría a su oficina y las clases se reanudarían este miércoles.
Sin embargo, la mañana de ayer, la directora sí entró, lo que generó la inconformidad de los maestros que están en su contra, por lo que dijeron que no se iban a retirar para respetar los acuerdos del día anterior, informó María Estela Caballero Moreno, contralora y tesorera de la escuela.
“Entonces, la maestra Yazmín Cerezo empezó a gritar que así no habían quedado, y agredió a una madre de familia. Los papás se enardecieron y tomaron la escuela”, agregó.
Cerraron la escuela y colocaron nuevas pancartas, ahora en defensa de la directora y en demanda de la salida de otras trabajadoras de la escuela.
“No vamos a soltar la escuela hasta que quienes empezaron este conflicto se vayan. Ya no vamos a permitir que entren a la escuela, se pierdan las clases que se pierdan”, expresó.
De acuerdo con las pancartas que colocaron en la puerta de la escuela, piden que salgan Marta Elisa Martínez Tevillo, Amadea Alarcón, Yaritza Lechuga Martínez e incluso Irma Melgoza Salinas, quienes, de alguna manera, dijo, han agredido a los padres de familia y no quieren que los problemas “lleguen a mayores”.
Apuntó que hasta la tarde de ayer no habían recibido la visita de una autoridad que pudiera resolver la situación. Por ello, anticipó que se quedarán en el plantel el tiempo que sea necesario y negó que sean pocos los que apoyen este movimiento.
Para concluir, señaló que el problema entre la directora y los maestros sí es un asunto interno, sin embargo consideran que las acusaciones “no tienen fundamento”.
“Como padres de familia, pedimos que se nos involucre en la investigación y no haya represalias”, finalizó.