Zacatepec.- El gobierno local anunció que a partir del próximo lunes enviará sus residuos sólidos urbanos a la planta valorizadora de Tlaltizapán, con lo que eventualmente cerrará el tiradero municipal, ubicado en la colonia Benito Juárez.

En conferencia de prensa, el edil Francisco Salinas Sánchez confirmó que el municipio participará en el proyecto regional de la Secretaría de Desarrollo Sustentable, que instaló dicha planta en Tlaltizapán, para acopiar los desechos de los municipios de la región.

“Anunciamos que a partir de esta semana, el municipio de Zacatepec comenzará a enviar las 26 toneladas de residuos sólidos que se generan diariamente a la planta de valorización del municipio de Tlaltizapán, acción que nos permite el cierre definitivo del tiradero a cielo abierto que por años ha ocasionado problemas al medio ambiente”, declaró el edil.

No obstante, luego dijo que no será a partir de esta semana, sino del lunes próximo.

Añadió que están en pláticas con la Secretaría de Desarrollo Sustentable para buscar la remediación del basurero.

“Hace seis meses metí un proyecto a Semarnat para el mejoramiento de ese basurero de ocho millones de pesos y estamos esperando ese proyecto”.

El edil aseguró que se incrementará el costo de enviar la basura al sitio de su disposición final, pues actualmente gastan 12 mil pesos y subirá a 25 mil por su traslado a Tlaltizapán.

También comentó que pretenden instalar un centro de transferencias, en un lugar todavía no determinado –aunque podría ser en el lugar conocido como el Platanar-, para depositar ahí la basura y después llevarla a Tlaltizapán.

Interrogado acerca de la queja que interpuso el Grupo Unidos por Zacatepec (Gruzu) ante la comisión de los derechos humanos sobre el asunto, el edil sólo respondió que “no le ha llegado nada”.

Por su parte, Marcelino Bahena Mena, integrante del Gruzu, aseguró que ya desde hace varios días, el titular de la Secretaría de Desarrollo Sustentable se había comprometido a cerrar ese basurero este jueves 20 de julio.

Consideró un triunfo de este grupo el cierre definitivo del tiradero, pues desde hace años exigieron su clausura.

Deploró que el presidente municipal se resistiera a cerrarlo, porque argumentaba que iba a gastar más dinero, pero en realidad, aseguró, la basura generaba ingresos económicos al municipio.

Asimismo, confirmó que existe una queja ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y también un amparo, ante la reiterada negativa del alcalde a cerrar el basurero, que podrían ya resolverse ante la clausura definitiva.

Lo que sí no ha quedado resuelto es la detención arbitraria de la que fueron objeto el mes de mayo, cuando realizaban una protesta a la entrada del basurero, y varios de sus compañeros fueron detenidos. Aseguró que se configuraron varios delitos, por lo que buscarán acciones legales contra los responsables.