El director general del Programa Universitario para la Inclusión Educativa y Atención a la Diversidad de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), José Enrique Álvarez Alcántara, aseguró que desde el año 2013, la institución instrumentó un programa para permitir el ingreso a personas con discapacidad, tanto a preparatorias, como al nivel superior.
“Generalmente ha habido por lo menos tres clases de obstáculos: los arquitectónicos, pues se tienen que adecuar las instalaciones para que las personas puedan permanecer y descansar en ellas; los administrativos, pues los exámenes de Ceneval no están en braille y tampoco tiene intérpretes de lengua de señas, ni apoyos para personas con dificultades neuromotrices, y finalmente, las barreras en términos pedagógicos, lo que son estrategias de enseñanza, acceso a la información en braille para ciegos e intérpretes en clases”, explicó.
Al respecto, Álvarez Alcántara destacó que la Universidad diseñó su propio examen en braille y un sistema de apoyo con intérpretes de lengua de señas.
“En este momento tenemos más de 125 alumnos con discapacidad en la Universidad: en la Facultad de Artes; en la Facultad de Teatro, Danza y Música; en la Facultad de Psicología, en la Facultad de Derecho, en Contaduría y Administración, y en las prepas de Jojutla y en la Prepa Uno de Cuernavaca. Hoy, contra hace cuatro años, tenemos más del triple de alumnos que teníamos con discapacidad, lo mismo que maestros o trabajadores, que se han ido incapacitando por cuestiones laborales o de vida”, detalló.
Añadió que hasta el año pasado no había ningún estudiante sordo y en este ya hay seis y entrarán seis más. Además refirió que “tenemos una persona ciega y con síndrome de Down en la escuela de Teatro, Danza y Música, intérprete de piano y hoy quiere entrar otra a Danza”.
Apuntó que la Secretaría de Educación Pública cuenta con un sistema de preparatoria abierta en Cuernavaca y Cuautla y con un centro de atención de educación especial para bachillerato, con el que, una vez terminado, pueden ingresar a la universidad.
Sin embargo, resaltó que aunque hay muchos estudiantes con discapacidad que han egresado, todavía hacen falta oportunidades en el mercado laboral.
“Tenemos licenciados en Derecho ciegos, tenemos egresados contadores trabajando dentro de la propia Universidad; pero la inserción laboral es un problema que escapa a la propia Universidad. Salvo mi caso, que doy clases en la UAEM. Hoy existe un programa de la Secretaría del Trabajo de inclusión laboral, pero no son trabajos profesionales, ése es un tema que está pendiente para el Estado mexicano y para los gobiernos porque en realidad el problema de la inclusión laboral ha sido sumamente complicado”, detalló.
Finalmente, Enrique Álvarez recomendó a los padres de familia no ocultar a los hijos con discapacidad que tengan. Porque además de que eso se refleja en las estadísticas y hay menos apoyos, también hay ya oportunidades para ellos.
“Ya hay sistemas de educación básica –primaria y secundaria– a través de educación especial; para el bachillerato pueden entrar a las preparatorias de nuestra universidad, o al Conalep, que tiene un programa para sordos. Hay escuelas, hay recursos y hay apoyos además”, finalizó.