En entrevista, el representante de los arroceros comentó que de acuerdo a la información de las dependencias federales e investigadores, el cambio climático amenaza el rendimiento de la planta para los próximos años, ya que cada vez se tienen más alteraciones, desde pocas o intensas lluvias, altas o bajas temperaturas, es decir cambios drásticos de temperatura, todo como parte de los efectos del cambio climático.
Agregó que ante esta situación, desde hace ya varios meses atrás, los arroceros de la región sur han estado trabajando en coordinación con el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap), con el delegado federal en Morelos de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), Rafael Ambriz Cervantes y el secretario de Desarrollo Agropecuario Roberto Ruiz Silva para contar con variedades de arroz que sean resistentes al cambio climático.
“Hemos venido trabajando con el Inifap, la Sagarpa y la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, buscan nuevas variedades que sean resistentes al cambio climático, esperando que se tengan buenos resultados”, apuntó.
Recordó que su arroz, es uno de los productos con grandes estándares de calidad; reconoció que el tema de la denominación de origen aún no ha permitido mejorar la comercialización del producto, sin embargo aseguró que se están redoblando esfuerzos para lograr incentivar su venta.
“Aún tenemos en bodega alrededor de mil 600 toneladas del grano, no se han podido colocar y estamos esperando cliente para poder venderlo a un precio justo. Estamos trabajando en el tema de la comercialización y seguimos promoviendo el arroz Morelos, ha sido difícil, pero tenemos que seguir trabajando y redoblando esfuerzos”, enfatizó Solís Alvarado.
Finalmente, recordó que en la cosecha del año pasado, el molino de arroz aún adeuda el pago a un promedio de 132 productores, equivalente al 50% de los arroceros.