Habitantes de diversas colonias del oriente de Cuernavaca protestaron en el palacio de gobierno por la instalación de cables de alta tensión subterráneos de parte de la empresa Firestone.
Sela Bravo Adame, una de las que encabeza el movimiento, dijo que de acuerdo a algunas consultas a especialistas en la materia, éste tipo de cableado es muy peligroso, y debiera de ir a tres metros de profundidad, sin embargo la llevan paralela a la red de agua, con una profundidad de 70 cm.
Comentó que los estudios revelan que la radiación provoca cáncer, esterilidad y otras enfermedades.
No obstante manifestó que cuentan con un recibo que muestra que la empresa que instala éstas redes entregó un cheque de un millón 200 mil pesos al ayuntamiento para conseguir los permisos correspondientes.