Cuernavaca, Morelos.- La Secretaría del Trabajo en Morelos vigilará que no se cometan injusticias en contra de quienes integran la Junta Local de Conciliación y Arbitraje (JLCyA), a partir de que este fin de semana pasado el Congreso de la Unión aprobara su desaparición, a fin de crear los tribunales laborales, que dejarán en manos del Poder Judicial la responsabilidad de seguir impartiendo la justicia laboral.

En un documento emitido por esa dependencia, entregado a La Unión de Morelos, se recuerda que hay quienes llevan la mayor parte de su vida laboral en la JLCyA del estado, por lo tanto, sería muy injusto que tras la reforma en la materia, que ordena la desaparición de esas estructuras, fueran despedidos.

En el documento no se precisa el número de personal de la junta, pero se destaca que hay quienes han hecho carrera en esa materia y deberían ser incluidos como parte de las nuevas estructuras que al respecto deberá crear el Poder Judicial a fin de evitar discontinuidad, sobre todo en el seguimiento de miles de expedientes que esperan sentencia y ya han superado algunas etapas en los procesos.

Se menciona que entre las muchas razones por las que se decidió la sustitución de las juntas locales por los tribunales laborales está la corrupción, pero igualmente se advierte que no todo ha sido manejado con perversidad, hay muchas cosas positivas que se deberían seguir aprovechando.

Por su parte, el dirigente estatal de la Federación de Trabajadores de Morelos (FTM), Vinicio Limón Rivera, calificó la acción como incongruente, porque bajo el esquema actual, el manejo es tripartita, “hay una representación de los sectores laboral y patronal en las juntas que permite resultados más apegados a la verdad jurídica y al derecho”.

Y en lo referente a la reforma en la materia, insistió en que no es benéfica para la clase trabajadora, porque la limita en algunos derechos históricos como el de huelga y busca ir terminando con los sindicatos que son producto de luchas históricas a lo largo de muchos años. Por eso advirtió que la Confederación de Trabajadores de México (CTM) seguirá presionando a fin de lograr algunas modificaciones en el documento final, que son claramente nocivas al interés colectivo, pero que además violan acuerdos y convenios celebrados con la Organización Internacional del Trabajo (OIT).