Cuernavaca, Morelos.- Durante este período vacacional, se espera un incremento del 16% en la demanda de atención por accidentes en el Hospital del Niño Morelense. La mayoría de ellos ocurren en la casa y son prevenibles. Las autoridades del nocosomio llamaron a padres de familia a extremar la precaución.
Rebeca Borgaro Payró, directora de la institución, indicó que durante los recesos escolares, cuando los infantes se encuentran en casa, estadísticamente han observado que aumenta el número de menores con lesiones que pueden ser incluso mortales, por accidentes.
Recomendó a los jefes de hogar a extremar la vigilancia en las zonas de mayor riesgo que son los baños y la cocina, ya que las principales lesiones que se atienden en urgencias en accidentes, son las quemaduras por escaldaduras, es decir, por líquidos calientes. De ahí que se plantea la importancia de mantener a los niños lejos de estufas, anafres, o cualquier instrumento que use leña y de preferencia utilizar en las cocinas las hornillas más lejanas o de atrás, para que los pequeños no alcancen los mangos de sartenes o las ollas.
También destacó que en Morelos son comunes los casos de ahogamiento por inmersión, es decir, ahogamiento, ya sea en casas o en balnearios. "En este caso es fundamental que aun cuando los niños y niñas sepan nadar, no se les deje de vigilar cercanamente", apuntó.
También recordó que el tercer tipo de incidentes más comunes en períodos vacacionales son las caídas y por ende las afectaciones son fracturas.
"Si un niño se cae hay signos de alarma que deben ser tomados en cuenta, pues podría haber alguna lesión importante. La primera es observar si tiene vómito durante la primera hora siguiente a la caída, que no se duerman o que tengan somnolencia, observar que no haya movimientos anormales de piernas, brazos, ojos o bien que cambie la marcha de los niños (la forma de andar). Si existen esos síntomas es fundamental que los padres acudan al médico".
Expuso que el nocosomio al año atiende en promedio 676 mil 123 consultas (en consulta externa) y un promedio de 24 mil 200 consultas en urgencias, y en la época de verano aumenta la demanda de atención en un 16%. Refirió que la institución está preparada para dar la atención requerida.
La directora también hizo notar que es fundamental que los padres soliciten la atención en urgencias reales, no sentidas, es decir, cuando se considera que está en riesgo la vida o la conservación de algún miembro o algún daño permanente, para no saturar ese y otros hospitales con solicitudes de servicio menos prioritarias.
Reiteró que cuando se presenta un accidente en niños es necesario acudir a sus centros de salud o a las unidades médicas y de preferencia no utilizar remedios caseros, sin autorización del profesional de la salud.