De manera simultánea, se ofrecen talleres de ciencia donde se instruye en el uso de microscopios y sus múltiples aplicaciones científicas.
El Cocyt, en coordinación con la BUAP y el INAOE, creó el programa Para ver a las estrellas, donde entregan las piezas para el armado de un telescopio e imparten un taller para capacitar a los asistentes en actividades de observación astronómica.
“El objetivo de esta actividad es llevar el método científico y concienciar sobre su importancia. No se necesita saber leer o escribir, esta actividad se realiza desde hace cientos de años, es un proyecto respaldado por la BUAP quien lo ha realizado por trece años con un total de 150 telescopios armados", puntualizó Alberto Sánchez López, director general del Cocyt.
Especialistas de la BUAP y el Cocyt imparten los talleres, donde instruyen metódicamente a los alumnos en el armado del telescopio, desde el nombre de cada una de sus piezas, conexiones, ajuste y finalmente la observación. Es importante destacar que las piezas son facilitadas por las instituciones al frente del proyecto, y que al final de la experiencia de aprendizaje el artefacto se queda en el lugar donde fue impartido el taller, con la intención de que la observación astronómica sea una actividad constante.
“Durante los talleres los jóvenes duermen en el sitio donde se imparte el taller y reciben refrigerios; se está trabajando con estudiantes de nivel secundaria y medio superior, además de integrar a los tutores en esta actividad para que más adelante formen clubes de ciencia en donde puedan intercambiar impresiones y conocimientos. Los especialistas realizan con el grupo la observación del sol, la luna y los planetas, en donde también reciben información de divulgación pública de la ciencia”, detalló el maestro Sánchez López.
En territorio oaxaqueño se han armado alrededor de 383 telescopios, con el mismo número de capacitaciones, mayormente en zonas rurales. El director del Cocyt resalta que estas regiones en donde las condiciones de vida son austeras, los niños toman como un juego la novedosa actividad de observar a través de un telescopio, por lo que imprimen un fuerte interés en la ciencia.
El fantástico mundo microscópico
Y como también existe un mundo diminuto, una actividad simultánea a Para ver a las estrellas es la capacitación de niños y jóvenes para la observación microscópica. El Cocyt diseñó una actividad en donde los alumnos deben plantear un problema y establecer cómo usarán el microscopio, de esto se trata el taller Lo pequeño es hermoso y fantástico.
“En el taller de observación microscópica, los estudiantes son asesorados por expertos que les muestran cómo armar, desarmar, ajustar y observar.
Durante la capacitación se les explica por qué es importante el método de observación y se les incentiva a formar sus clubes de ciencia”, declaró Alberto Sánchez López en entrevista para la Agencia Informativa Conacyt.
Para hacer llegar cualquiera de estas actividades a una zona en particular, es necesario participar en la convocatoria pública que divulga el Cocyt, a través de su Dirección de Vinculación.
Las actividades de observación científica del micromundo y los astros están ligadas fuertemente a diversas vertientes de la ciencia como las matemáticas, física, biología, geología, entre otras. El director del Cocyt enfatizó que estos talleres forman un puente entre la ciencia y el niño, porque se realizan de manera divertida y práctica, y que finalmente es necesario cambiar los métodos tradicionales de la enseñanza de la ciencia, permitiendo que los niños formulen sus problemas y diseñen soluciones lo que permite que amplíen su visión del mundo.