Padres de familia de la Secundaria General Número 2 de Alta Vista en Cuernavaca cerraron el plantel y suspendieron clases "hasta nuevo aviso", en protesta por la remoción de un subdirector, al que apoyan para que ascienda a director y exigieron una auditoría a la aplicación de recursos del Programa de Infraestructura Educativa.
En este retorno, tras el período vacacional invernal, los estudiantes junto con algunos padres tuvieron que regresar a su casa, pues se encontraban con una cartulina en el portón de entrada que decía: "no habrá clases hasta nuevo aviso". El motivo es que los inconformes decidieron que no permitirían la llegada de directivos que no les garanticen un manejo transparente de recursos y que faciliten la concordia entre los docentes.
Desde antes de las vacaciones los jefes de hogar de esa institución ya habían tomado las instalaciones para denunciar diversas anomalías de quienes estaban al frente de la secundaria, y demandaron la salida del entonces director José Alfredo Mata Torres. En esa ocasión acordaron que tomaría las funciones de director el subdirector Javier Lagunas, con quien un importante número de profesores sí aceptaban laborar.
Uno de los padres de familia, Jaime Soto, señaló que este jueves se enteraron de que no se cumplió el acuerdo por parte del Instituto de la Educación Básica y no contaban con un director, a pesar de que ellos apoyaban el ascenso del profesor Lagunas.
Reclamaron que desde hace meses las instalaciones educativas están en pésimas condiciones, incluso vulnerables en cuanto a seguridad y no tienen lo más indispensable, al grado de que los profesores tienen que pasar lista con la ayuda de sus teléfonos celulares porque muchas lámparas de las aulas no sirven.
Aseveró que se había planteado con el director de nivel secundaria Aurelio Merino y otros funcionarios del IEBEM, que se realizaría una auditoría sobre la aplicación de fondos del programa de infraestructura, pero jamás se ha rendido cuentas. Consideraron que incluso no quieren darle el cargo al subdirector porque les apoyó en pedir un informe del uso del dinero, cuya cantidad ni siquiera ha sido precisada de forma transparente.
Por su lado, el directivo Aurelio Merino Morales explicó que el compromiso era la permanencia del profesor Javier Lagunas hasta el mes de diciembre, pero destacó que los cargos de director de los planteles, por la reforma educativa y por tanto por ley y disposición federal, están sometidos a concurso de oposición. De tal manera que no se puede asignar de forma directa al subdirector con esa plaza.
Es más, los propios padres -destacó- reconocieron que el subdirector no hizo examen para ascender a la dirección.
Comentó que sí se realizará la revisión a la aplicación de los recursos de los diferentes programas, pero para ello se requiere que al regresar del período vacacional se permita la entrada del personal que deben hacer esa labor y sobre todo que no se afecten las clases de los alumnos.
Dijo que se instaló una mesa de diálogo con la disposición de llegar a acuerdos que permitan que la escuela trabaje en condiciones adecuadas y con calidad, sin pasar por alto las normas.
Cabe referir que desde enero del 2015 los padres de familia de esa secundaria ya habían realizado movilizaciones para exigir mayor seguridad, ante las versiones de que incluso en el centro escolar había denuncias de un presunto abuso sexual a una estudiante y sobre posible oferta de drogas a los jóvenes en las inmediaciones del plantel.