Tovar Sánchez señaló que desde su primera reestructuración del plan de estudios, pasó de 11 a 14 académicos, lo que representa un 90% proporcional a la matrícula incluidos en el padrón nacional de investigadores del Consejo Nacional de Ciencia Y Tecnología (Conacyt), en beneficio de la formación de recursos humanos.
Un beneficio más, dijo, es la movilidad académica con homologación curricular que permitirá a los alumnos cursar un semestre en universidades como la autónoma veracruzana, el instituto de ecología, el colegio de posgraduados, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), entre otras.
Otro de los cambios positivos será mantener el compromiso de los alumnos por concluir sus estudios de maestría con un resultado del 55% por ciento de eficiencia terminal, logrando que el maestreante termine sus posgrados en dos años y medio gracias al acompañamiento tutorial.
Este programa educativo está orientado a la investigación y surge en respuesta a necesidades de diferente orden para potenciar el impacto (UAEM) en temas fundamentales, como la sostenibilidad en la región centro sur de la República Mexicana.
Recordó que la Maestría en Biología Integrativa de la Biodiversidad y la conservación en su cuarta generación, busca formar profesionales con preparación académica y científica, orientados a la investigación que generen conocimiento relacionado con el origen, la estructura y funcionamiento de la biodiversidad, así como para detectar sus posibles amenazas y para plantear soluciones para su conservación.