La seguridad en las zonas de Morelos limítrofes con el Estado de México, fue reforzada y se establecieron retenes para la revisión de vehículos, tras confirmarse la fuga del narcotraficante mexicano Joaquín Guzmán Loera, alias “El Chapo”, quien huyó del penal de El Altiplano el sábado alrededor de las diez de la noche. 

De acuerdo a la información proporcionada ayer por el gobierno federal, el jefe del Cártel del Sinaloa escapó por un túnel de kilómetro y medio al que entró por la zona de regaderas del penal de máxima seguridad.

La obra de ingeniería que permitió la fuga tiene una altura de un metro con setenta centímetros y desemboca en una casa en obra negra.

Ayer, en su página web,  la revista proceso informaba que desde que se vio al delincuente por última vez en las cámaras de video vigilancia hasta que la Policía llegó a la zona donde desemboca el túnel pasaron alrededor de dos horas, el tiempo que dispuso para escapar.

ALERTA EN MORELOS

Aproximadamente a la 1:30 horas del domingo, autoridades federales solicitaron el apoyo de todas las corporaciones estatales para la búsqueda y localización del líder del cártel de Sinaloa, cuyo emporio de tráfico de drogas se extendió en todo el mundo en la última década.

En coordinación con la Policía Federal y Ejército mexicano, elementos del Mando Único desplegaron un fuerte operativo por las carreteras México-Cuernavaca, Zempoala-Toluca, Cuernavaca-Ocuilan y Miacatlán-Ixtapan de la Sal, que conectan a Morelos con el Estado de México.

Los elementos policiacos asignados al operativo de búsqueda y los retenes en las zonas limítrofes, informaron que el despliegue arrancó durante las primeras horas del domingo y alrededor de las 10:00 de la mañana se establecieron los retenes en cada uno de los puntos prioritarios y se aplicó un patrullaje constante por estas vías de comunicación con apoyo del helicóptero de la Policía Federal.

El gobierno de Morelos citó a una reunión extraordinaria del grupo interinstitucional de seguridad y ordenó establecer los puntos de control en las diferentes fronteras que tiene Morelos con el Estado de México, así como mantener coordinación también con las autoridades de la Procuraduría de la República y de la ciudad de México que también participan en este operativo de rastreo del capo más conocido y escurridizo del mundo.