Más de 20 mil personas participaron ayer en la Marcha por la Paz, a la cual convocó el obispo de la Diócesis de Cuernavaca, Ramón Castro Castro, quien -durante su mensaje- hizo un llamado a razonar el voto y advirtió que la iglesia católica no estará de acuerdo con quien atenta contra la vida y la familia.
La movilización inició pasadas las 8:30 de la mañana y partió de cuatro puntos: la avenida Plan de Ayala, la iglesia de El Calvario, el bulevar Benito Juárez y la avenida Morelos, a la altura de la estatua del Niño Artillero.
Con música, oraciones y aplausos, los feligreses caminaron para congregarse en la catedral de Cuernavaca, donde el obispo encabezó una misa para clamar por la paz en el país y en el estado de Morelos.
Ramón Castro Castro mencionó que Morelos se encuentra sumido en una crisis, que no beneficiará al estado si se sigue permitiendo que sean pocos los responsables de un desarrollo integral.
“El estar unidos y trabajar como pueblo es un gran avance dentro de la sociedad, pues la gente ha perdido el miedo y expresa que no se va a quedar con los brazos cruzados en las problemáticas que enfrenta”, refirió.
Además realizó un llamado a la ciudadanía para que sea consciente el día de las votaciones el próximo 7 de junio, pues anunció está en las manos de los morelenses ejercer un derecho y una obligación que puede mejorar notablemente los problemas que enfrenta la sociedad.
“Conozcamos bien a nuestros partidos y sus ideologías, así como a los candidatos y sus propuestas, ya que un partido político defiende una ideología y a la hora de gobernar ésta puede convertirse en políticas públicas e incluso leyes. La iglesia no puede estar de acuerdo con quien atenta contra la vida y la familia”, señaló Castro Castro.
Cabe señalar que la movilización se desarrolló sin contratiempos y actores políticos como Maricela Velázquez Sánchez, Cuauhtémoc Blanco y Luis Miguel Ramírez Romero vestidos de blanco se incorporaron a la marcha –según dijeron- a invitación del líder católico en Morelos.
Sin embargo, no se les permitió utilizar la caminata para realizar actividades proselitistas.