Se presume que el pasado martes por la mañana, Abel “N” golpeó a su esposa Aurora “N” dentro del domicilio de ambos en la colonia Bartolo del municipio de Huitzilac, y ésta se vio obligada a salir de la casa para refugiarse con una amiga.
El pasado viernes tras acudir al Sistema de Desarrollo Integral Para la Familia (DIF), regresó al domicilio conyugal para llevarse consigo a sus hijos, pero ahí se dio cuenta que uno de ellos fue golpeado por su marido sin un aparente motivo, según señala el parte policiaco al que ayer le dio lectura la fiscal del caso.
Por ello, alrededor de las siete de la noche del pasado viernes pidió auxilio a elementos policiacos que a bordo de la patrulla 0015 realizaban un recorrido de vigilancia y que detuvieron al imputado, que en un inicio se resistió al arresto.
La omisión en la que incurrieron los policías al momento de elaborar su informe dio pauta para que el juez declarara ilegal la detención, pues el ministerio público no pudo informar qué lesiones presentaba la menor y la hora en que se presume fue golpeada por su progenitor.
En la audiencia de ayer el juez cuestionó a la fiscal, pero esta no supo dar respuesta a las preguntas, sólo se remitió a decir que ella se basaba en la información que le proporcionaron los elementos del Mando Único.
Sandoval Lomé reconoció que ante tal situación no podía retener más tiempo al acusado, pues afirmó que de acuerdo a lo que establece el artículo 16 de la Constitución General de la República, la detención tiene que ser en flagrancia y se ignoraba la hora en que fue detenido el agente de seguridad privada.
“De hecho, no sólo eso, sino que tampoco los agentes nos ilustran las lesiones de la menor, ni tampoco hicieron una entrevista con ella para saber la hora o día en que fue golpeada”, dijo el juez al momento dar lectura al auto.
La esposa del detenido estuvo presente en la audiencia y minutos antes de que esta iniciara solicitó al ministerio público que pidiera una medida cautelar que le permitiera regresar a su casa, y que su cónyuge no pudiera acercarse a ella, ya que su integridad física corría peligro.
Sin embargo, la audiencia de ayer tomó un giro inesperado cuando el defensor público de oficio detectó el error de los policías aprehensores, pues estos tenían que elaborar un parte más detallado, en el que se informara hora y día de los hechos, y haber entrevistado a la menor para que les narrara lo ocurrido.
Sin embargo, el juez Sandoval Lomé afirmó que a pesar de que Abel fue puesto en libertad de manera inmediata, el próximo martes a las 12 horas tendrá que presentarse nuevamente ante la justicia, ya que la Fiscalía General del Estado le realizará de manera formal imputaciones en su contra por el delito de violencia intrafamiliar.