En conferencia de prensa, el director del Centro Morelos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Víctor Hugo Valencia; el alcalde de Totolapan, Jesús Alfaro Ramírez, y la especialista en restauración ya citada, dieron a conocer la realización de dicho encuentro en el que se desarrollarán conferencias por parte de especialistas de la Dirección de Patrimonio Mundial del INAH, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), la Secretaría de Desarrollo Sustentable y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, entre otros.
Durante este taller a celebrarse del 19 al 21 de este mes, también se realizará la restauración de una casa en la cabecera municipal de Totolapan, con la intención de que este proyecto pudiera extenderse a otros municipios, con el fin de preservar construcciones de casas hechas de adobe, así como promover su conservación y difundir el conocimiento ancestral sobre su elaboración.
El alcalde de Totolapan indicó que además del aspecto cultural, este rescate podría contribuir a que haya mayor afluencia turística en esa demarcación e impulsar la economía.
Por su parte, la coordinadora restauradora comentó que este proyecto de taller interdisciplinario de conservación y restauración de Arquitectura de Tierra, surgió hace dos décadas en el norte de México en un trabajo compartido con otros especialistas de Estados Unidos, al descubrir que en México “tirábamos el adobe, en tanto que en aquel país estaban y siguen buscando construir con este material y no sabían cómo”, aun cuando edificar una casa con ese material puede resultar para ellos muy caro.
El objetivo es entrar en un proceso de recuperación y rescate de una tradición que se creía perdida, pero que aun hay gente que la sabe hacer, como en el caso de Totolapan.
Destacó que en Morelos tenemos once monasterios declarados patrimonio de la humanidad, conocidos como los “conventos”, pero en la lista indicativa de la Unesco, se habla no sólo de esas construcciones sino también de la gente y de los pueblos que los circundan, por lo que las casas de tierra son parte de ese sustento y patrimonio cultural.
Recordó que el uso de la tierra conocida como adobe es sustentable, además de bello, tiene otras características térmicas y sobre todo, hizo notar el valor como identidad e historia de los pueblos como Totolapan. “Se trata de rescatar un conocimiento milenario, pero también de dar orgullo sobre lo que tenemos. Se hablaba de que en la arquitectura de tierra, mucha gente quiere su casa de adobe, piensa, no me va a alcanzar, porque cada adobe es muy caro, y en contraste mucha de la gente que no tiene recursos vive en casas de adobe, entonces la información de lo que se tiene no llega y es nuestra responsabilidad a través de un taller, hacer conciencia de que la gente sepa lo que vale y lo que tiene”.
Advirtió sobre el daño que provoca el que se mezclen otro tipo de materiales de construcción en las casas de materiales de tierra: “es como un cáncer que va destruyendo las construcciones, meterle técnicas modernas, por eso vemos que hay casas que tienen una antigüedad de 100 años y siguen ahí, por eso vemos la importancia de hacer ver a la población y compartir lo que sabemos para que otros puedan seguir adelante”.