Además, dijo, se está trabajando en el acompañamiento y orientación educativa que ha permitido reducir los altos índices de reprobación, al subrayar que el porcentaje de deserción se ha reducido en un 12 por ciento.
García Cordero explicó que cuando se detecta algún problema con un alumno o se ausenta de las aulas, de inmediato se atiende y se buscan soluciones como el llamar a la casa del estudiante, platicar con los padres de familia para conocer las causas de la ausencia a las actividades escolares.
Reconoció que los alumnos registran problemas en asignaturas tales como matemáticas, químicas, talleres, y se tienen talleres en los que se encauzan para que las grandes dudas que tienen sean apoyadas con personal especializado y capacitado.
Para los exámenes regularizadores que se presentarán a finales del mes de agosto, se está implementando un curso de regularización para reforzar las áreas en las que se reportan dificultades de aprendizaje y se evite la reprobación.
Lamentó que en algunos casos, no se cuenta con el respaldo de la familia para apoyar a los alumnos, por lo que la estrategia se complementa con los cursos y talleres, pero destacó que se mantiene el acercamiento con los padres de familia de manera coordinada con los profesores de la institución.