Los integrantes de dicha sociedad, en conferencia de prensa, negaron que su rechazo a la profesora sea por cuestiones de discriminación relacionadas con homofobia por su preferencia sexual, como la maestra lo ha denunciado.
Calificaron como "perversa" la actitud de la multicitada maestra, quien aseveró que incluso recibió amenazas de agresión física por parte de uno de los padres, y aseguraron que hay más de 300 firmas de jefes de hogar que están en contra de su permanencia en el plantel.
Replicaron que la profesora no es aceptada en la escuela porque, presuntamente, de manera reiterada abandonaba sus clases y no respetaba los horarios; señalaron a la docente de ingresar al plantel a personal ajeno a la secundaria en horario de trabajo, lo que –consideran– pone en riesgo la seguridad de sus hijos y desatiende sus tareas.
Denunciaron que les molestó la conducta de la profesora, a quien acusan de haber falsificado documentos para competir en un torneo, lo que provocó la suspensión de la secundaria por dos años en eventos deportivos.
De igual forma, sumaron a sus alegatos que la docente Gaxiola Peraza se apoderó de la bodega y materiales deportivos y evitó que otros maestros la usaran y "utiliza ese espacio para cuestiones personales".
A decir de los inconformes, en actividad física aumentó el índice de accidentes escolares por falta de atención y ausencia de la misma académica.
De igual forma, entre los motivos de su rechazo, expusieron que ya estando suspendida por el IEBEM, Ada Lilia ingresó a la secundaria y rompió la cerradura para colocar otra nueva y se quedó con la llave, como si esa bodega fuera de su propiedad.
Otra de las inconformidades denunciadas por estos padres fue que Gaxiola Peraza les exigió la compra de un uniforme completo de educación física con un costo de 900 pesos, que ni siquiera se usa como debería, porque la maestra no acude a todas sus clases.
Además, aseveraron que ha demostrado falta de honestidad, ya que para competir en los torneos elige de cada salón a los alumnos que fuera de plantel se preparan físicamente en algún deporte y los presenta como si ella los hubiera preparado, con lo que engaña a la comunidad.
A decir de los inconformes, resulta “injusto” que el área jurídica del IEBEM no haya encontrado elementos para sacarla de la escuela, ya que jamás fueron tomados en cuenta los testimonios de los padres, en torno a la investigación que supuestamente hizo la autoridad para comprobar el desempeño de su función.
Los miembros del comité de padres se mantuvieron en la postura de rechazar a la profesora y reclamaron al IEBEM que dé marcha atrás a la decisión de reinstalarla en la secundaria, porque aseguran que ella es quien los ha provocado tomándoles videos y fotografías “para que ocurra algún incidente violento”.