Daniel Matías González Tokman, investigador del CIByC, informó que la especie motivo del estudio es la Nephila clavipes, cuyo nombre común es araña de seda dorada. Explicó que las hembras tienen un tamaño de cinco centímetros y los machos de 2.5. Es bastante colorida con patrones de coloración negros con amarillo.
Señaló que las arañas son especialmente sensibles a la calidad del ambiente en el que están viviendo porque son depredadoras, dependen en gran medida de la calidad de las presas que se comen y que éstas a su vez dependen del sitio en el que viven.
González Tokman comentó que la especie a investigar teje una tela dorada para atrapar a sus presas y su veneno, aunque es potente y letal para sus presas, es poco ofensivo para el ser humano, y es un animal fijo por tejer su telaraña.
El tiempo de estudio será de un año para evaluar cómo ha evolucionado el arácnido, investigación que iniciará en la próxima temporada de lluvias en la que van a medir la estructura de la telaraña, ya que dependiendo de la calidad es la estructura, así como el tamaño de la araña y su fisiología.
Daniel Matías González reconoció que en la reserva ecológica hay poca investigación con animales, la mayor parte es con plantas y lo que no se hace es conocer el estado de salud de los animales que finalmente son reflejo de cómo está el ambiente en general, dijo al destacar que el estudio de los arácnidos es relevante en el área porque incorpora técnicas y la interdisciplina para conocer la fisiología, ecología y evolución de la especie.