Luego de que la Fiscalía General del Estado (FGE) reveló que, presuntamente, los homicidas pretendían quitarle su bebé a Marlene y venderlo, los allegados a la víctima estallaron, indignados, y pidieron la pena máxima para quienes privaron de la vida a la joven y su hija, quien se llamaría Adela Michelle.
Jesús Alejandro Mondragón, cuñado de la víctima, narró que Gabriela –identificada como presunta partera– fue quien, con engaños, llevó a su casa a Marlene para luego privarla de la vida.
“Tenía una semana de haber conocido a esa persona y la conoció en el ‘Hospital de la Mujer’, allá en Temixco. Ahí la conoció. A partir de ese día la citaban en su casa, le regalaban cosas. Según la señora decía que estaba embarazada y comentando con ella, mi cuñada le decía que iba a tener una niña y ella le decía que iba a tener un niño, pero que había comprado cosas de niña y le decía que se las iba a regalar”, narró.
La tarde del domingo, la familia y vecinos de Marlene realizaron la primera marcha, en el municipio de Emiliano Zapata, y ayer acudieron al palacio de gobierno para manifestarse frente a la ofrenda dedicada a las víctimas para exigir justicia y todo el peso de la ley a quienes arrebataron de la vida a Marlene y a su bebé Adela.
El pasado miércoles 2 de abril, en un domicilio ubicado en la colonia Pro-Hogar, en Emiliano Zapata, fue encontrada sin vida a Marlene Adán Jaimes, de 20 años de edad, en tanto que el cuerpo sin vida de su bebé, de ocho meses de gestación, fue recogido en un hospital.
Las autoridades tuvieron conocimiento de los hechos porque la hija de tres años de la joven víctima se salió de la casa y deambuló por la calle, por lo que la Policía vio sola a la menor y comenzó a indagar sobre su procedencia, hasta dar con el domicilio donde fue encontrada su madre, envuelta en bolsas de basura.
De acuerdo con las investigaciones de la fiscalía estatal, Marlene fue llevada con engaños a la casa en donde le practicaron la cesárea con un cúter, se desangró y fue asfixiada.