“Justamente la restauración ecológica puede utilizarse como herramienta para revertir situaciones de transformación de la vegetación natural, esto incide en la captura de carbono y eventualmente tiene un impacto que se va sumando para cuestiones de mitigación a causa del cambio climático”.
Valenzuela Galván comentó que el cambio climático, sumado a la transformación de la vegetación natural, pudiera llegar a crear procesos de desertificación, con la consecuente disminución de superficies para cultivo y por tanto afectar cuestiones de alimentación.
En ese sentido, dijo, es conveniente que existan investigaciones en relación al cambio climático que ya se desarrollan en el CIByC de la UAEM. Sin embargo, cada investigador tiene su contexto, “lo que se conoce como líneas generales en el tema y no todas tienen una vinculación directa, pero sí se establecen las colaboraciones con estas líneas de trabajo”.
Lo que se trabaja es la restauración ecológica, dijo, al señalar que la reforestación es una actividad que recupera la cobertura arbórea y no necesariamente es lo único que hay que recuperar.
Dio a conocer que en las campañas de reforestación no hay vinculación directa entre el CIByC y las dependencias oficiales para sugerir especies, al asegurar que los universitarios están en disposición de participar con el conocimiento, “para ello estamos trabajando en Sierra de Huautla con Pronatura y con diferentes colegas del país”, concluyó.