El funcionario estuvo en la clausura de los festejos del 25 aniversario del Instituto Nacional de Salud Pública, donde destacó la importancia de la labor de los investigadores para el desarrollo de políticas públicas que finalmente tienen un impacto directo en la salud de los mexicanos.

En entrevista, el secretario federal ratificó que en el país no hay alerta por rebrotes de influenza y que los casos así como los lamentables decesos están dentro del panorama que ya estaba previsto de acuerdo con el comportamiento de enfermedades en esta temporada invernal.

“Estamos viviendo la temporada invernal y por ello tenemos que tener muy claro que de octubre a marzo es que habrá casos de padecimientos respiratorios, entre ellos la influenza, tanto estacional como la AH1N1”, sostuvo tajante al confirmar que las condiciones que se han observado en todo el país no salen de los canales endémicos.

Explicó que cada año en el país hay alrededor de 25 millones de casos de padecimientos respiratorios, de los cuales alrededor de 140 mil son neumonías, 20 mil con síntomas sospechosos, es decir, con cuadros clínicos pero sin confirmación. En influenza estacional, hay de cinco a diez mil casos anuales en México y el comportamiento es similar en todo el planeta. Por tanto, recalcó que ésta es una situación esperada, que no está fuera de control.

De igual forma insistió en que no se debe bajar la guardia y sostener medidas de prevención de higiene, como el lavado de manos, el estornudo “con ética” y evitar la automedicación para evitar el contagio y complicaciones.

Salomón Chertorivski de igual forma fue cuestionado respecto a la labor de la Secretaría en torno a la contingencia por el frío y la sequía en la zona norte del país. Respondió que como parte del programa integral del gobierno federal para atender la contingencia en esa región, se reforzó la vigilancia epidemiológica.

Expuso que se envió unidades móviles –entre ellas cabe recordar que participan unidades morelenses-- que están atendiendo a la población de la zona indígena. Pero además en los cinco estados del país declarados en contingencia, apuntó, se reforzó el monitoreo sobre la calidad del agua, para que esté en condiciones de consumo humano, que los alimentos mantengan los márgenes de higiene necesarios.

Explicó que se sostendrá la vigilancia para la atención oportuna de posibles casos de padecimientos respiratorios y diarreicos e incluso de las enfermedades transmitidas por vectores, como el dengue. “En estos lugares donde hay escasez de flujo de agua, tenemos que vigilar los recipientes para que se cubran y no se conviertan en criaderos del mosco transmisor del dengue”.

Dijo que se desplazaron 70 unidades móviles de cinco estados, se instalaron comités de vigilancia sanitaria y hasta la fecha no hay ninguna alerta o riesgo de brotes en la región.

Sobre la presunta muerte de personas por falta de alimentación o desnutrición, el secretario dijo que conforme al seguimiento que han hecho las unidades médicas de esa zona no se observa ningún fenómeno de salud que salga de los canales esperados o detectados en otras épocas del año en esas zonas donde hay poblaciones que viven en condiciones muy difíciles.