Luego del trágico caso en el que un hombre y una mujer, que eran matrimonio, tuvieron una pelea y con arma blanca se provocaron heridas que causaron la muerte de ambos, sus tres menores quedaron huérfanos. Entrevistada al respecto, la presidenta del DIF Morelos dijo que se habrá de dar la atención correspondiente a los menores conforme a la norma.
Recordó que hay un plazo de tres meses para indagar si los menores tienen algún familiar que pudiera hacerse cargo de estas criaturas y destacó que se buscará que permanezcan juntos luego del suceso tan terrible que enfrentan por este lamentable caso.
Mayela Alemán de Adame destacó que en estas situaciones es primordial la labor de reinserción a un hogar que el DIF hace de pequeños; dijo que en los cinco años de esta administración se ha logrado reincorporar al seno familiar a un total de 800 infantes, ya sea con familiares o abuelos o con los padres biológicos, después de un proceso de tratamiento.
Además, subrayó que se logró integrar a hogares adoptivos a 80 menores y existen en lista de espera 79 parejas que desean adoptar.
Sin embargo, la presidenta del DIF expuso que lamentablemente el proceso de adopción se vio de alguna manera detenido durante nueve meses debido a la intervención de un diputado local “que de manera irresponsable ha denunciado al DIF y ha atentado contra la buena acción de una institución que está promoviendo una familia para estos niños. Es el caso del niño que el papá mata a la mamá en una comunidad de Tetecala; el papá está en la cárcel. El DIF da a los tres niños en adopción en una familia donde los aman”. Así llamó a que se saquen las manos de estos procesos de adopción que “se llevan a cabo de manera transparente y que contribuyen a que los pequeños tengan una familia donde reciban amor y educación”.
Expresó que es fundamental que en todos los sectores, tanto en el educativo como en el social, se fomente la formación de valores. “Sigo apelando, pidiendo y exigiendo tanto a autoridades educativas, a civiles y gubernamentales que forjemos valores, valores de paz, de comunicación donde el diálogo resuelva todos los conflictos que existen. Esa violencia nos lastima, nos duele, y no sólo nos tiene que preocupar, nos tiene que ocupar para que esto no vuelva a suceder. Y pido a las autoridades que se aplique la ley por encima de todo”.