Maquilladas de forma ostentosa, con minifaldas, escotes pronunciados, con tacones muy altos, mujeres y hombres, quienes también portaban pancartas, marcharon este domingo en la capital morelense como parte del movimiento internacional convocado por ciudadanas, denominado “Marcha de las Putas”.
Esta movilización que inició en Canadá en enero de este año, ha tenido sus réplicas en distintas ciudades del mundo y de México. Este domingo, también tuvo eco en Cuernavaca y al mismo tiempo en Puebla y Morelia, Michoacán.
A su paso por las avenidas del primer cuadro, el grupo de alrededor de doscientas personas, incluso niños y niñas, distribuyó volantes a la población, con especial énfasis a señores, como una actividad de difusión y sensibilización. Los materiales impresos hacían referencia al llamado, en particular a los hombres: “Su hija, su esposa, su hermana, su amiga, su madre, pueden salir a la calle sintiéndose a gusto y segura, evita piropos y conductas ofensivas hacia a las mujeres. No es No señores”.
Quienes participaron en esta movilización que ha sido convocada de forma muy notaria a través de las redes sociales de Internet por ciudadanas en general, llevaban la consigna central internacional de “No es No” en clara alusión en contra del acoso y violencia de género. “Este cuerpo es mío”, “No al acoso sexual”, “Si uso faldita, no es por facilita”, “No veas putas donde hay mujeres libres”, “Entiende, si ella dice no, es no”, “Si por vestir así soy puta, así sea orgullosamente”, “Nada justifica el acoso sexual”, “Este cuerpo no se toca, no se agrede, no se viola, no se mata, este cuerpo es mío. Atentamente puta activista”, fueron algunas otras de las leyendas que se mostraron a lo largo de la marcha y durante la concentración en la plaza “Emiliano Zapata”.
Nadxiielli Carranco Lechuga expuso que la “Marcha de las Putas” es una movilización de ciudadanas, en general; no es convocada por alguna organización específicamente. En varios países y ciudades mexicanas, contra el acoso sexual. Comentó que así se ha denominado con el propósito de desestigmatizar a las mujeres y las agresiones que sufren. Plantearon que es fundamental que se entienda que tachar de “puta” no sea una manera de negar a las mujeres derechos; que no se diga que por ser o vestirse de tal o cual forma, provocamos que nos acosen. Es decirle a todo mundo que no importa cómo nos vestimos, cómo caminamos, si bebemos, o si una niña o jovencita es guapa o bonita, o si salimos a caminar cinco cuadras de la casa hasta la parada de la ruta para ir a la escuela o a trabajar, nadie tiene derecho a lastimarnos, a humillarnos u ofendernos.
En el pronunciamiento, los participantes en la marcha expusieron que lamentablemente el problema de acoso en nuestras comunidades es muy común, y va desde el “manoseo”, el llamado “piropo”, que resulta ser ofensivo y denigrante, hasta el abuso sexual o la violación.
Reiteraron que los hombres y en particular las mujeres tienen derecho a la libertad de ir a cualquier parte sin ser agredidas, sin tener miedo y menos aun de sufrir cualquier tipo de violencia, que provoca miedo y descomposición social.