Además de llevar a cabo un foro en torno a este tema, autoridades estatales y federales realizaron la entrega del citado reconocimiento a morelenses distinguidos que fueron seleccionados mediante una convocatoria abierta.
En este contexto, se informó que de acuerdo con información del Inegi, Crespo, por cédulas consulares, se calcula que hay más de 250 mil morelenses trabajando en territorio estadounidense, aunque podría haber 100 mil más que cruzaron de forma ilegal y que no han tenido contacto alguno con autoridades mexicanas estando del otro lado de la frontera. La mayoría de ellos se concentra en Chicago, California y Mineapolis. Los principales municipios de donde salen los morelenses son Cuernavaca, Temixco, Axochiapan, Tepalcingo, Jonacatepec y Jantetelco.
En el marco del acto oficial, el secretario de Desarrollo Humano y Social, Ricardo Esponda Gaxiola, reconoció que es necesario seguir trabajando para generar más y mejores empleos y elevar la calidad de vida de la población, para evitar que los paisanos tengan que salir de su país para buscar mayor sustento para ellos y sus familias.
El dolor de dejar a la familia, la tierra, la patria
Los migrantes que recibieron dicho reconocimiento, muchos acompañados por familiares y amigos, señalaron que han recibido diversos reconocimientos en Estados Unidos por la comunidad latina, pero prácticamente para todos ellos ésta es la primera vez que se les reconoce por su trabajo en su propio estado, en tierra propia.
David Peñaflor, artista migrante, quien reside en Orlando, comentó que él afortunadamente llegó a Estados Unidos en una condición en la que ha podido ir y volver continuamente. No obstante, expresó que finalmente las ausencias son dolorosas y ha sido testigo de cómo otros mexicanos pasan 10 y 12 años sin poder volver a su país a ver a su familia: “Definitivamente la familia es muy doloroso tener que dejarla, aunque mi situación siempre fue de poder ir y venir, y aunque las ausencias sean de 3 ó 4 meses siempre pesan mucho. Los hijos van creciendo y se pierde uno mucho de cosas familiares importantes”.
El artista opinó que “lo que nos hace falta en México es más trabajo mejor remunerado a los profesionistas, al campo. Es lo que más hace falta… Yo sí quisiera que todo mundo considerara que los que estamos fuera, estamos haciendo un esfuerzo grande por México. Somos la segunda (fuente de) divisas que tiene nuestro país y los gobiernos tienen que cuidar más a sus migrantes”.
Por su parte, Pablo Castro, periodista, migrante quien vive en Las Vegas, expresó en entrevista visiblemente conmovido: “Es una emoción grandísima porque soy de Cuernavaca; nací y me crié en Cuernavaca, pero vivo desde hace casi 25 años en Estados Unidos. Pero una emoción, porque siempre he estado conectado a Cuernavaca. Tengo orgullosamente las dos nacionalidades; sigo siendo mexicano aunque tenga nacionalidad estadounidense… Somos miles de morelenses los que vivimos en Estados Unidos y otras partes del mundo y tal vez esos miles pudiéramos estar acá en algún trabajo o desempeñando algún papel, alguna función. Pero creo que sí se puede. Lo principal es tener ganas de trabajar en tu tierra o donde no sea tu tierra, y llegar a ser un ejemplo para los demás”.
“Profetas en tierra propia”: los galardonados
La presea consta de una medalla de plata con la imagen del general Emiliano Zapata, así como el escudo del estado de Morelos, y un reconocimiento por parte del Congreso del Estado.
Los galardonados son Griselda González Santana, originaria de Emiliano Zapata, radicada en Los Ángeles, California, reconocida por su trabajo a favor de los migrantes mexicanos que han visto amenazado el patrimonio familiar por la crisis financiera. Ha logrado que varios de ellos recuperen su patrimonio con los intereses moratorios con las instituciones financieras.
Juan Bello Ocampo, originario del municipio de Zacatepec, con residencia en California desde 1991, destaca por su incansable lucha social, apoyando a migrantes que son deportados y abandonados en Tijuana, además de otorgar asesorías legales a través de la Fundación Cañera A.C. desde 2007, la cual cuenta con oficinas en California y Tijuana, donde dan albergue temporal a los migrantes.
Pablo Antonio Castro Zavala, originario de Cuernavaca, con residencia en Las Vegas, Nevada, ha realizado actividades comunitarias, políticas y dentro del medio de entretenimiento ha obtenido miles de sillas de ruedas que han beneficiado a personas de escasos recursos en México y Estados Unidos.
Germán González Flores, del municipio de Jiutepec, laboró en diversos medios de comunicación en Morelos como el Sol de Cuernavaca, el Nacional del Sur, Diario de Morelos y el Regional del Sur. Actualmente es director de noticias del periódico El Comercio de Colorado y colabora en la Oficina de Enlace Multicultural en el Distrito Escolar de Denver.
David Peñaflor, originario de Cuernavaca, radicado en Florida, fue reconocido por su trabajo en la difusión cultural de nuestras tradiciones en la Unión Americana. Ha recibido diversos reconocimientos en México y Estados Unidos, como la medalla al Mérito Artístico en Cuernavaca.
Marlon Martínez Octaviano, originario del poblado de Coatetelco del municipio de Miacatlán, radica en California. Ha encabezado marchas en pro de los migrantes en California, Colorado, Texas y Arizona. De igual manera ha difundido junto con su familia las tradiciones de Morelos y dirige la comparsa “San Juan Bautista de Coatetelco, Morelos”.
Eli Rodríguez Domínguez, originario de Ixtlilco el Grande del municipio de Tepalcingo, radica en Minessota. Es presidente del Club Morelense, el cual ha brindado el apoyo dentro del Programa 3x1 para Migrantes en importantes obras como remodelación de unidades deportivas, canchas de usos múltiples, pavimentación, entre otras.
Estos dos últimos migrantes no les fue posible acudir al evento debido a su situación migratoria, por lo que la presea fue entregada en ambos casos a sus hermanos.