Hasta la venta de paletas se desplomó.
Para Víctor Ocampo Abarca, quien toda su vida se ha dedicado a vender paletas de hielo en las colonias Chamilpa y Teopanzolco en Cuernavaca, ha sufrido por la baja venta de su producto, debido que mucha gente no consume por el miedo a las enfermedades respiratorias.
“En este negocio a veces se sufre o a veces hay pocas ventas, pero durante la pandemia no he vendido casi nada porque la gente quiere evitar a toda costa enfermarse de la gripa. Yo sigo trabajando normalmente de 12 de la tarde hasta las 5 y a veces no vendo ni una paleta a pesar de que en estos meses hace mucho calor”.
Ocampo Abarca comentó que busca cómo generar ingresos para su familia, aparte de la venta de paletas. “La verdad ahorita estoy trabajando de ‘viene viene’ en un supermercado cuando tengo tiempo libre, porque con las paletas no la hago, si no llevo dinero a mi casa mi familia no come y así puedo sacar, aunque sea para comprar tortillas”.
El entrevistado dijo que sus familiares y amigos lo apoyan durante esta contingencia: “en los momentos difíciles es cuando te das cuenta con qué personas cuentas, porque muchos aunque tienen problemas económicos me ayudan con despensa o apoyo económico”.