Dijeron que por intervención de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), habían acordado que este viernes tendrían una reunión con el presidente municipal, pero de último momento fue cancelada sin razón alguna.
Los inconformes indicaron que analizan la posibilidad de conformar una agrupación, para evitar que se sigan dando estos casos, pues acusan que el trato no es equitativo, ya que existen otros comerciantes que venden en la misma zona y no son retirados como ellos. Aseguran que algunas de los manifestantes cuentan con permiso, pues tienen más de 20 años trabajando, con la venta de productos tales como comida.
Denunciaron que muchas veces los decomisos de las mercancías se realizan sin identificación de los inspectores que sólo llegan con camionetas con logos del gobierno municipal, aseguraron que algunos de ellos han sido maltratados y sus productos ya no son recuperados pues las multas impuestas son demasiado elevadas, incluso aseguraron que ya interpusieron más de 70 quejas ante la CEDH.
Expresaron que ellos demandan una audiencia con el edil, para saber si es verdad que él autoriza este tipo de trato, pues aseguran que lo único que quieren es trabajar.