Ventas esporádicas les permiten subsistir, exponen.
Pese a las disposiciones municipales que impiden la reactivación del comercio ambulante, en la calle de Clavijero los vendedores, desesperados por la falta de ingresos, decidieron colocarse en las banquetas para vender ropa, tenis, cubrebocas, frutas, verduras y otros productos.
En frente y a los costados de las puertas que permiten el ingreso a la Plaza Lido, al menos una decena de puestos se colocó en la vía pública, la mayoría de ellos propiedad de empleados o locatarios del mencionado centro comercial, el cual fue cerrado al público debido a la contingencia por el covid-19.
Entrevistados sobre el motivo por el cual decidieron realizar sus ventas en la vía pública a pesar de que el semáforo de la contingencia se mantiene en rojo, señalaron que están desesperados por la falta de ingresos.
Advirtieron que hay jefes y jefas de familia que requieren de vender productos para poder subsistir; el cierre de sus puestos durante más de 30 días les ha generado pérdidas económicas importantes, sin contar que algunos de ellos no son propietarios de los locales y deben de pagar renta y otros más son empleados que prefieren burlar a la autoridad municipal.
“Salimos con temor y nos mantenemos a la expectativa, si vemos que alguien del ayuntamiento viene, levantamos nuestras cosas y nos movemos, porque corremos el riesgo de que nos quiten la mercancía”, explico Sara, quien colocó sobre la banqueta una manta y ahí coloco ocho pares de tenis para ponerlos a la venta.
Reconoció que son pocas las personas que circulan por Clavijero “pero hacemos nuestra lucha, algo tiene que caer y nos sirve para comer”, insistió.