Iniciativa privada demanda estímulos fiscales y apoyo financiero para enfrentar la contingencia.
Por el momento no hay apoyos a empresas y prestadores de servicios ante la contingencia por el Coronavirus Covid-19. “Se están recibiendo las propuestas del sector empresarial, pero nos encontramos en la fase uno y no hay cálculo certero de pérdidas económicas y los recursos públicos son limitados”. Así lo señaló la secretaria del ramo, Ana Cecilia Rodríguez González.
Al término de una reunión con líderes de cámaras y asociaciones integrantes del Consejo Coordinador Empresarial, la funcionaria externó que el gobierno estatal está abierto a escuchar todas las peticiones y propuestas para elaborar un plan de reacción que en su momento se dará a conocer.
“Estamos viendo las coincidencias. Pudiera haber apoyos a fondo perdido en materia de financiamiento, con tasa cero y, sobre todo, sería necesario establecer cuáles son las condiciones de quiénes serían los beneficiarios, porque sabemos que el dinero es limitado, no hay dinero que alcance, por lo tanto tenemos que ser muy claros”, advirtió.
Explicó que se analiza entre las opciones algunas que favorezcan la conservación de empleos, que es un tema que preocupa a la sociedad y a la administración gubernamental.
Pidió la cooperación de los empresarios para proteger la planta laboral, con especial énfasis en grupos vulnerables.
Reiteró que nos encontramos en la fase uno de transmisión del virus, por lo que las acciones se están proyectando para las siguientes etapas o niveles. Hasta ahora, aseguró, no se ha reportado el cierre de fuentes de trabajo.
La titular de la Secretaría de Desarrollo Económico y del Trabajo destacó la importancia de que los empresarios sean sensibles y sigan las medidas de prevención en los centros labores, como el evitar el hacinamiento, mantener la distancia recomendada de un metro, el lavado de manos constante, disponer de gel antibacterial, cumplir con la recomendación de no saludar de mano, beso o abrazo, entre otras recomendaciones.
De igual forma, Rodríguez González llamó al sector a cuidar a sus trabajadores en condición de mayor riesgo, como mujeres embarazadas, con enfermedades que comprometen el sistema inmunológico y personas de edad avanzada, mediante medidas que faciliten o hagan posible el trabajo en casa. Pero recordó que no son obligatorias, al menos, por ahora.
Refirió que hay empresas, como Unilever, que sí han enviado a algunos de sus trabajadores administrativos al denominado “home office”.
Desmintió las versiones que han circulado en redes sociales sobre la obligatoriedad de que las empresas permitan las ausencias y que tengan que pagar, en esta fase. Precisó que la legislación federal del trabajo establece que cuando hay una contingencia sanitaria, el empleador está obligado a pagar un salario mínimo hasta por 30 días. No obstante, enfatizó que en este momento no aplica. Se consideraría ese escenario hasta que se declarara la fase tres de transmisión por parte de la Secretaría de Salud.
De igual manera, aclaró que en aquellos casos en los que se ha decidido suspender labores a cambio de días de vacaciones, es necesario que haya un consenso con los trabajadores. Los empleadores podrían plantear esta alternativa, pero tampoco es forzoso.
Empresarios solicitaron a las autoridades de los tres niveles de gobierno estímulos fiscales y apoyo financiero para hacer frente a la contingencia causada por la pandemia del Covid-19.
En reunión con los secretarios de Salud y Desarrollo Económico, Marco Antonio Antonio Cantú Cuevas y Ana Cecilia Rodríguez González, los representantes de las distintas cámaras que integran el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), manifestaron su preocupación por el daño económico que causará la emergencia internacional por la propagación del virus.
El presidente del CCE, Ángel Adame Jiménez, dijo que como empresarios respaldan las medidas preventivas impulsadas por el gobierno estatal y federal. Sin embargo, sostuvo que las autoridades también deben emprender un plan de emergencia económico.
De esta forma, dio a conocer los planteamientos de las cámaras empresariales al gobierno federal, tales como la suspensión de los pagos mensuales del Impuesto Sobre la Renta (ISR) e Infonavit; acelerar la devolución del Impuesto al Valor Agregado (IVA) y del Impuesto sobre Producción y Servicios (IEPS), y que esta misma tributación se deje de aplicar en los costos de la gasolina y diésel.
Mientras que al gobierno estatal pidieron aplicar un Plan de Contingencia Laboral; suspender la aplicación del Impuesto sobre el Hospedaje (ISH) y el Impuesto Sobre la Nómina (ISN); ampliar los tiempos de pago de Fondo Morelos, así como aplicar créditos a tasa de interés cero para apoyo a los negocios, entre otros estímulos.
Los empresarios también plantearon a los 36 gobiernos municipales prorrogar los descuentos en el pago del impuesto predial a personas físicas y morales, diferir los pagos por el servicio del sistema de agua potable y la condonación de trámites para las empresas.
Al respecto, la secretaria de Desarrollo Económico, Ana Cecilia Rodríguez González, admitió que no existe un plan de contingencia para apoyar a las empresas en Morelos. Sin embargo, aseguró que se reunirá con la Secretaría de Hacienda para que se puedan ofrecer créditos a fondo perdido para las empresas, a fin de evitar despidos durante la contingencia.