En México se generan seis mil toneladas al año de residuos de envases de agroquímicos y en Morelos 80 toneladas, de las que sólo se recuperaron 35 toneladas en 2018, informó Alexander Martín Segura Benítez, integrante de la asociación Amocali, a cargo del programa Campo Limpio que impulsan las empresas agroquímicas en México

En el marco de la “cuarta mega capacitación campo limpio”, sobre el manejo integral de envases vacíos de agroquímicos, impartida a estudiantes de la Facultad de Ciencias Agropecuarias (FCA) de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), se informó que esperan recuperar el 50 por ciento de los residuos en los próximos dos años.

Segura Benítez señaló que desde hace cuatro años capacitan a los futuros ingenieros agrónomos para que compartan con los usuarios del campo esta información, pues a pesar de la difusión que existe sobre la contaminación que se genera, continúan tirando y quemando los envases de agroquímicos.

“Les damos la información para que sean los portavoces de lo que se debe hacer con estos residuos peligrosos, porque la tendencia es que se seguirán utilizando los agroquímicos en el país”, explicó.

El representante de Amocali en los estados de Morelos, Guerrero y Estado de México, señaló que el envase como residuo peligroso tiene un tratamiento diferente a los residuos urbanos, “algunos materiales se utilizan para productos que no deben tener contacto con el ser humano”, dijo.

La organización civil opera el programa “plan de manejo de envases vacíos”, que busca recuperar en todo el país los envases de agroquímicos, que contaminan diez veces más que los residuos que se generan en casa.

Martín Segura explicó que el proceso adecuado para el manejo integral de dichos envases inicia después de utilizar el agroquímico, al que se le hace un triple lavado para eliminar 99.9 por ciento del residuo tóxico; en un segundo paso se deposita en un centro de acopio temporal que se ubica en Ciudad Ayala, y finalmente se clasifica por tipo de material, porque cada uno tiene un destino final diferente.

El envase como residuo peligroso tiene un tratamiento diferente a los residuos urbanos