“Comer sencillo, con alimentos integrales hechos en casa; procurar acercarnos a las prácticas ancestrales benéficas; liberar el estrés mejorando nuestras relaciones entre vecinos, amigos y familia; estar contentos y agradecidos, son parte del camino para recobrar la salud”, son palabras de Ana Toledo, autora del libro “Sana comida que sana”.
Ana Toledo es una joven zapoteca que habita en territorio tlahuica, y que al convertirse en madre se interesó por las prácticas ancestrales de la cocina. Se acercó a cocineras de Ocotepec, Cuernavaca, y de las señoras del mercado para servir sobre la mesa alimentos saludables.
La joven zapoteca señala que en medio de lo que se podría describir como una crisis de salud, existen personas, agrupaciones y colectivos que se preocupan y se ocupan en la recuperación de la salud a través de la herbolaria y la alimentación alternativa. El colectivo cultural “Flores y cacao” es una de las agrupaciones ocupadas en difundir acciones en el estado de Morelos para mejorar la alimentación. El colectivo está integrado precisamente por Ana Laura Toledo Vásquez en colaboración con Angélica Romanini Flores Ribot, April Lorena Ramos Chatrón, Edith Pérez Florez, Gabriela Avendaño Ortega, Jeffrey Daniel Chatrón Ramos, Luis Atzin Añorve Díaz y Regina Pliego López.
El libro “Sana comida que sana”, impreso en julio de 2019, con financiamiento del Programa de Apoyo a las Culturas Municipales y Comunitarias (PACMyC), hace un llamado a la conciencia sobre los alimentos que se consumen día a día y presenta una propuesta de recurrir a la cocina ancestral, entendiendo ésta como lo que tenemos en el pasado cercano a nuestros abuelos, que poco escuchaban de enfermedades crónicas.
“Me atrevo a decir que las cocinas representan la fuerza creativa y sostén amoroso de las mujeres y sus familias, pues la comida es un patrimonio y un reflejo de nuestra relación con el suelo, de ahí la importancia de sanar el suelo como elemento primordial para la alimentación saludable. La alimentación ancestral es sencilla, el reto es conseguir acercarnos a ella en un entorno que ya no es ancestral, que está cada vez más contaminado y aparentemente complicado para alimentarnos sanamente”, explica Ana Toledo.
Acorde a la investigación hecha por Ana Toledo, en México el 19.9% de la población muere de enfermedades cardiacas, el 12.9% de enfermedades malignas, el 14.4% de diabetes y el 90% de todos estos decesos están relacionados con sobrepesos y obesidad, además, de que México ocupa uno de los primeros lugares en obesidad infantil.
Para las personas que se buscan mejorar su salud a través del alimento, “Sana comida que sana” incluye un recetario de cocinas ancestrales y otras más contemporáneas.
“La reconciliación es la pieza clave para recuperar la salud. Reconciliación con nuestro cuerpo, con nuestra alma, con nuestra madre la tierra, con nuestros ancestros y con la comida, pues una comida óptima es aquella que se adapta a nuestra ecología interna y al medio en el que vivimos”, expresa Ana Toledo.
Por otra parte, en Tetela del Volcán, también existe un grupo de jóvenes interesados en promover la alimentación sana, con productos que emanan de la tierra. Vanesa Canizal Tapia, promotora de la cocina tradicional de Tetela del Volcán, informó que recientemente ella y un grupo de jóvenes integrado por Lucero Sánchez Gónzalez, Benjamín Martínez Martínez y Rosa García Flores, participaron en el Tercer Concurso Estatal de Gastronomía 2019, organizado por el Instituto de Capacitación para el Trabajo del Estado de Morelos (Icatmor), y ganaron el primer lugar con una “Sopa de Alaches”, en la categoría de “Platillo de rescate”.
El alache es un quelite, una planta comestible que crece como maleza, se come la hoja, la flor y el tallo.
Los grupos ganadores del referido concurso representaron al estado de Morelos en un concurso nacional realizado en Oaxaca durante la primera semana de septiembre del presente año.
“Estamos difundiendo el rescate de cocina tradicional de recolección porque consideramos que es primordial que los jóvenes se involucren en estas prácticas que favorecen la salud”, refiere Vanesa Canizal.
La reconocida promotora de la cocina tradicional morelense informó que en el concurso de Oaxaca no hubo premio para los grupos de Morelos participantes, no obstante, resaltó que más allá del premio, lo importante es el aprendizaje y la difusión de la cocina tradicional que se hace en Morelos.
Tanto Ana Toledo como Vanesa Canizal coinciden en la frase de Hipócrates, que señala “Que el alimento sea tu medicina”.