Pacientes renales se quejan de que por la falta de agua no se otorga ese servicio en la Unidad de Especialidades Médicas.
Desabasto de agua potable se ha solucionado con pipas, dice la dependencia.
Familiares de pacientes con enfermedades renales demandaron al gobierno estatal su intervención debido a que –aseguraron- desde hace dos semanas la Unidad de Especialidades Médicas no cuenta con el servicio de agua potable, por lo que se ha suspendido el tratamiento de diálisis. Las autoridades sanitarias desmintieron esa versión al asegurar que los problemas de abasto provocados por el SAPAC lo han solucionado mediante la compra de pipas.
Los inconformes se manifestaron ayer lunes en la sede del Poder Ejecutivo, donde expusieron que dicha clínica, ubicada a unos cuantos metros del Hospital General de Cuernavaca José G. Parres, no tiene el suministro del vital líquido, presuntamente por adeudos con el SAPAC.
Señalaron que diariamente alrededor de 45 personas reciben tratamiento y a muchas de ellas les suspendieron las hemodiálisis “por la falta de agua, porque ya ni las pipas han llevado”.
Atribuyeron a estas fallas en el servicio –incluso- algunos decesos, pues se trata de enfermos que requieren de dicho procedimiento para vivir.
De acuerdo con los manifestantes, el propio personal de la unidad les ha dicho que es problema del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (SAPAC) por los cortes del servicio, derivados de adeudos.
Expresaron su preocupación por que continúe esta problemática y con ello pudiera complicarse la salud o hasta sobrevenir la muerte de sus familiares, ya que no cuentan con recursos económicos para que se les haga la diálisis en alguna institución privada.
Muchos de los enfermos -expusieron- y sus familiares vienen a Cuernavaca desde otros municipios como Tepoztlán y Axochiapan, por lo que gastan en transporte sin que reciban el tratamiento.
Añadieron que se trata de servicios prioritarios que la Secretaría de Salud debería tener programados, con recursos reservados, pues se trata de atención prioritaria de la que depende la vida de cerca de 100 pacientes con insuficiencia renal crónica.
Sin embargo, mediante un comunicado, la Secretaría de Salud cuestionó las afirmaciones, al señalar que no ha habido decesos por la contingencia derivada del abasto de agua potable, ya que se han contratado pipas.
A continuación el comunicado oficial:
Servicios de Salud de Morelos (SSM) informa que pese a que el Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (SAPAC) no suministra de manera regular el agua en la Unidad de Especialidades Médicas (UEM), se han tomado las acciones pertinentes para mantener el servicio de diálisis y hemodiálisis.
Héctor Barón Olivares, director general de SSM, detalló que dependiendo el tandeo de SAPAC, se contratan de entre 10 y 12 pipas por semana para mantener una atención regular a los 45 pacientes diarios que reciben sesiones de hemodiálisis en la UEM.
En tanto, Barón Olivares negó que se haya cancelado el servicio o que hayan fallecido pacientes por este desabasto de agua, como lo aseguraron algunos ciudadanos a los medios de comunicación el día de hoy.
Asimismo, explicó que como parte de la estrategia para garantizar una atención de calidad a los usuarios, se da prioridad a los casos de extrema urgencia, mientras que los menos graves son reprogramados.
“Servicios de Salud de Morelos por ningún motivo descuida el bienestar de sus pacientes, de manera permanente se están realizando las gestiones necesarias antes las autoridades correspondientes para solucionar el problema de agua potable, además que se ejecutan acciones emergentes para garantizar la atención día con día”, finalizó el director general.