Recientemente se dio a conocer que dicha distinción fue entregada al doctor Enrique Galindo Fentanes en la categoría de Trayectoria por su labor en el campo de la biotecnología. Dicho experto refirió que la asociación civil Agrobio México también premia la categoría de Tesis cada año.
Destacó que en esta octava edición el jurado científico de dichos premios, conformado por investigadores de reconocidas instituciones académicas y del sector industrial, evaluaron las propuestas y decidieron sobre los ganadores de las categorías de Tesis de Licenciatura, de Maestría y de Doctorado, así como la de Trayectoria en Investigación en Biotecnología Agrícola.
En este sentido, expresó con beneplácito que cinco de los siete ganadores de los Premios Agrobio 2010 a la investigación científica son del estado de Morelos.
Además del propio Galindo Fentanes -miembro y ex presidente de la Academia de Ciencias de Morelos- que fue distinguido con el Premio Agrobio 2010 por su trayectoria en investigación en biotecnología agrícola, este año el jurado científico determinó reconocer a tres ganadores en la categoría de Tesis de Doctorado.
Explicó que “Oswaldo Valdés López fue alumno del Doctorado en Ciencias Biomédicas de la UNAM en el Programa de Genómica Funcional de Eucariotes del Centro de Ciencias Genómicas y se graduó de doctor en octubre 2009. El sistema biológico de su proyecto de investigación durante el doctorado fue el frijol (Phaseolus vulgaris), que es la leguminosa de consumo humano más importante en el mundo.
Por su lado, Sabino Pacheco Guillén fue alumno del Doctorado en Ciencias Bioquímicas de la UNAM en el Departamento de Microbiología Molecular del Instituto de Biotecnología y obtuvo su grado de Doctor en abril del 2010. Pacheco Guillén trabajó en entender las bases moleculares de la especificidad de las toxinas Cry producidas por Bacillus thuringiensis, que se han utilizado en las últimas décadas para proteger a los cultivos del ataque de insectos, una de las mayores plagas de importancia en la alimentación humana y ganadera. La principal ventaja de este tipo de control es que no afecta el ecosistema por ser biodegradable y que es muy específico contra sus insectos blanco.