La organización demanda que la reubicación de maestros en el nuevo proyecto educativo se ajuste a los horarios que ya tienen
La dirigencia seccional del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) sostuvo que no permitirá que con la compactación de grupos se afecte a sus afiliados, y demandó que la reubicación de maestros en el nuevo proyecto educativo se ajuste a los horarios que ya tienen.
La lideresa de la organización sindical, Gabriela Bañón Estrada, admitió que la tendencia nacional a la fecha ha sido continuar con el cierre de algunos grupos por la reducción de matrícula, especialmente en el nivel de primaria.
Debido a que el número de estudiantes es menor en ciertos planteles, la autoridad decidió cerrar grupos y que los maestros que se quedaron sin alumnos sean reubicados o que se les reasignen tareas, entre las que se encuentra encargarse de llevar los denominados "clubes" que contempla la nueva reforma educativa que este ciclo escolar se puso en práctica.
Se trata de materias o clases adicionales que se imparten a los estudiantes para complementar su formación o regularizarlos, por ejemplo en matemáticas, o en lengua materna (español), dibujo, artes o actividades físicas entre otras.
Bañón Estrada expresó que se están cumpliendo las advertencias que ya habían hecho públicamente desde las primeras semanas de este año escolar: hay conflictos con los profesores al no contar éstos con los perfiles y peor aún cuando se pretende reubicar a los maestros de centros de trabajo en sitios muy lejanos.
“Los maestros están trabajando, están cumpliendo con los clubes y las tareas que les han puesto, pero hay inconformidad, es un conflicto que no podemos tapar ni se puede ignorar, entonces, en el cien por ciento de esas escuelas donde se está aplicando la reforma hay incertidumbre, hay molestia”, aseveró al adelantar que este conflicto podría detonar.
Dejó en claro que el SNTE hasta ahora ha impedido que a los trabajadores se les envíe a escuelas muy lejanas. Alertó que un derecho adquirido de los docentes es que no sean reubicados a sitios que no les convengan. “Ellos quieren avanzar pero lo estamos deteniendo, siempre de manera respetuosa y cuidadosa”, acotó.
También dejó ver la resistencia a la compactación, al sostener que primero deberán ver si esa decisión tiene fundamento pedagógico: “estamos demandando que para que ocurra una compactación primero se justifique que no hay alumnos. Además no vamos a permitir que haya compactación donde queden grupos muy numerosos, porque eso pedagógicamente tampoco es propio”.