El titular de los Servicios de Salud dice que sólo hay dos casos confirmados y nueve sospechosos de padecer la enfermedad transmitida por las garrapatas.
Los casos más recientes de rickettsiosis se registraron desde octubre, informó el director de los Servicios de Salud de Morelos (SSM), Héctor Barón Olivares, quien rechazó que exista un brote de dicha enfermedad.
Refirió que el reporte oficial indica que en lo que va del año hay dos pacientes con diagnóstico confirmado y nueve sospechosos, cuyas muestras fueron enviadas al Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (Indre) y los resultados no han sido dados a conocer.
El funcionario estatal señaló que se trata de casos "importados", pues el contagio ocurrió muy posiblemente por un joven que viajó al norte del país.
Barón Olivares confirmó que hubo dos decesos (que corresponden al par de casos confirmados) desde octubre pasado, al tiempo de anotar que ya se realizaron acciones de búsqueda y prevención de contagio en la zona y no hay una constante en el contagio ni más casos confirmados, por lo que no se puede considerar que se trata de “un brote”, como lo señalaron algunos ganaderos de Tlaltizapán.
Explicó que en las acciones de búsqueda intencionada y control epidemiológico se detectaron dos mil 960 casos de personas expuestas, es decir, que conviven o manejan animales que tienen garrapatosis, o pulgas, y este es el vector principal por el que ocurre el contagio.
Mencionó que de acuerdo con los datos oficiales, el paciente índice (el primero que mostró la enfermedad) fue un joven de 16 años de Tlaltizapán, quien viajó al norte del país y muy probablemente contagió a su abuelo, que es el segundo paciente que fue confirmado y murió.
En torno a esa comunidad, argumentó el funcionario, se realizaron acciones de prevención con nebulizaciones y tratamiento para perros, “porque se encontraron muchas mascotas infestadas” del vector.
Recordó que los síntomas son muy similares a los del dengue: dolor de cabeza, fiebre, aparición de granitos y comezón, malestar generalizado del paciente y dolor abdominal por inflamación del hígado.
Destacó que los casos sospechosos se registraron en Tlaltizapán y en Temixco y los más recientes se identifican el 18 de octubre, se les tomaron pruebas y están pendientes los resultados por parte del Indre.
Apuntó que sí existe tratamiento, por lo que las personas que muestren dichos sintomatología deben acudir al centro de salud más cercano y deben referir la posible exposición al vector ya citado.