En este sentido, Bernardo Pastrana puntualizó que la agricultura por contrato es una práctica mediante la cual las agroindustrias, exportadores, proveedores nacionales y supermercados, además de otros interesados, contratan la producción primaria con productores, haciendo uso de contratos formales.

Agregó que desde el gobierno estatal, a través de la SEDAGRO y con el total apoyo de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA), se impulsa este mecanismo en Morelos dando seguimiento a los acuerdos pactados con los productores de arroz, en la reunión donde se acordó el precio de referencia para el pago de la pre-liquidación para este año en las instalaciones del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) de Zacatepec.

El secretario de Desarrollo Agropecuario explicó que los cañeros y los sorgueros, ya participan con excelentes resultados y ahora los arroceros se han sumado, adelantando que el Molino de Jojutla administrado por Jesús Solís firmó 4 convenios bajo el esquema de agricultura por contrato, donde cada cupo equivale a 90.72 toneladas, pagando estos entre 300 y 317 dólares, se firmaron en total 13 cupos equivalentes a 1 mil 179.36 toneladas en beneficio de 70 productores.

Pastrana Gómez destacó que los demás molinos de Cuautla, Emiliano Zapata, y el de Puente de Ixtla, están en proceso de firmar también agricultura por contrato, ya que el desarrollo tecnológico, los cambios demográficos, las preferencias del consumidor, la liberalización del comercio y la movilidad de los capitales financieros, han forzado a los sistemas agrícolas a organizarse en cadenas y redes de valor para tener el control sobre las actividades de producción, procesamiento y distribución.

Se dijo confiado de que en el estado de Morelos la agricultura por contrato es y será el futuro del campo, al afirmar que en estos contratos se pactan condiciones específicas tales como producto, calidad, cantidad, lugar de entrega, fecha de entrega, precio y forma de pago, asegurando al productor la venta anticipada de su cosecha, al comprador una fuente segura de abasto, un precio competitivo para los cadenas productivas y la promoción de mecanismos de administración de riesgos (coberturas).