Cuernavaca, Morelos.- Luego de la falla en dos transformadores que dejó sin el suministro habitual de energía eléctrica al Hospital del Niño y el Adolescente Morelense todo el fin de semana pasado, la secretaria de Salud, Patricia Mora González, indicó que en todos los hospitales hay plantas de electricidad y por lo tanto no hubo afectación. Los expertos aún investigan las causas de las fallas y sólo uno de los dos aparatos ya fue reparado.
La funcionaria aseguró que en el HNAM no hubo afectación alguna a los pacientes, porque entró de inmediato en operación la planta, que es propiedad del nosocomio. Argumentó que se pidió al personal ahorrar energía eléctrica, con el fin de dar prioridad a las áreas más importantes, como terapia intensiva y refrigeradores.
Dijo que de acuerdo con la información de expertos de la CFE, se averiaron dos transformadores, en algunas partes internas conocidas como “devanador”, lo que significa que “se desconfiguró”. Uno de esos aparatos comenzó a funcionar desde la madrugada del sábado y para resolver el suministro total se hizo “un puenteo” a otro de los transformadores que sí se podía utilizar.
“Se canceló el uso de un solo elevador, se apagaron computadoras, luces en pasillos, pero todas las áreas, como quirófanos y lo demás, siguió funcionando, conforme a los planes de seguridad que se tienen en los hospitales”, aseguró la funcionaria.
Dijo que se enviaron siete ambulancias con equipo de alta tecnología, para que en el “caso potencial de que hubiera algún problema, se llevara a los niños de áreas críticas a otro hospital, pero eso no fue necesario”.
Rechazó las versiones de que los pacientes hubieran estado en peligro, al sostener que ya se había garantizado también el suministro de diésel para el funcionamiento de la planta.
Hasta este martes sigue funcionando sólo uno de los dos transformadores, porque todavía se tiene que analizar qué tan profundo fue el daño y si es reparable.
Mencionó que “el evento del fin de semana” tuvo un costo de 600 mil pesos por el puenteo y las reparaciones que se tuvieron que hacer.
“A mí me explicaban los expertos que tanto el Hospital del Niño, como el (Hospital) el Centenario (del ISSSTE) el CREE y el C5, tienen un equipo de antenas que se conectan entre sí, para generar que se evite que cuando cae un rayo, a la hora que viene, cuando llega a ese campo de energía, el rayo se va a otra parte; entonces los expertos no creen que haya sido un rayo. Lo que creemos es que finalmente las redes eléctricas que conducen la electricidad son las que pudieron haber ocasionado ése. Además, dentro del hospital hay otra caseta que filtra la energía que llega… son como unas bobinas y una de ellas sigue dañada y cuando se abra se tendrá que saber si se puede reparar o comprar otro. Tendremos que hacer un análisis de instalar otros mecanismos de protección”.