Cuernavaca, Morelos.- “Las universidades cumplen con una buena tarea, las cosas las hacen bien, algunas mejor que otras, todas están evaluadas, lo cual me parece muy importante, porque una universidad que no se evalúa, como tantas veces hemos dicho, se devalúa”, sostuvo Juan Ramón de la Fuente Ramírez, exrector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), quien se pronunció porque se le ofrezca más apoyo a las universidades públicas del país.

Durante su visita a la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), en donde presentó el libro de su autoría “Marihuana y salud”, quien fuera rector de la UNAM, de 1999 a 2007, consideró que si tuvieran más recursos las universidades públicas, podrían hacer más cosas.

La cobertura de educación superior en nuestro país sigue siendo muy baja, “ha crecido, pero a cuentagotas”. En México –dijo- el número de jóvenes que no puede seguir sus estudios es muy grande.

“Creo que hay que hacer un esfuerzo adicional, siempre se puede y exigirles más, porque si también (las universidades) reciben más recursos de la sociedad, tienen que hacer mejor su trabajo. Muchas universidades pueden crecer en su matrícula si tienen más recursos, muchas universidades pueden abrir nuevas instalaciones, tener nuevos campus en otros lugares, pero sí necesitan recursos; el razonamiento es muy claro, se necesitan más recursos y cuesta canalizarlos, pero al país le ha venido costando mucho no hacerlo”.

De la Fuente Ramírez consideró que si se quiere resolver un problema de raíz, se necesitan estrategias mas integrales. “La educación no solamente es una palanca de desarrollo, no solamente es un mecanismo de movilización social, sino, en estos momentos para México, puede ser la opción que resulte verdaderamente suficientemente atractiva como para balancear este reclutamiento inmenso de jóvenes que está haciendo el crimen organizado”.

Respecto de la actuación de los rectores, Juan Ramón de la Fuente dijo que “los rectores, y el rector Vera no tiene que ser la excepción, hacen un área que es muy meritoria, trabajan en condiciones casi siempre muy limitadas, tienen una enorme responsabilidad y van lidiando con el paquete de la mejor manera posible. Así que pienso que los rectores hacen bien su tarea y además hay que apoyarlos mientras sigan siendo los rectores”.

El también secretario de Salud -en 1994- subrayó que se debe honrar la autonomía universitaria, al referir que “la autonomía universitaria no puede, bajo ninguna circunstancia, ponerse en entredicho”.

La autonomía universitaria, dijo, es absolutamente necesario que se preserve, no implica que no se realicen auditorías o que no haya rendición de cuentas; que las instancias responsables para garantizar la transparencia de los recursos públicos actúen, no tiene nada que ver con la autonomía universitaria, y para que haya más recursos tiene que haber más transparencia, eficiencia y exigencias razonadas por parte de las comunidades universitarias en el país, dijo, al pedir apoyo a los rectores por significar una autoridad moral en la sociedad.

“Tienen que rendir cuentas en virtud de la calidad de sus egresados, de la calidad de sus investigaciones, y obviamente de la transparencia, la eficiencia en que utilicen los recursos que administran”, expuso.