La higiene personal es el concepto básico del aseo, limpieza y cuidado del cuerpo; también influye en la mejora en la salud, su conservación, así como en la prevención de enfermedades. El cuidado y limpieza de las uñas, más que un asunto de estética, permite evitar que sean transportadoras de hongos o bacterias que desencadenan alguna enfermedad, puntualizó la coordinadora de Salud Pública del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), María del Rocío Manjarrez Aranda.

La especialista del IMSS señaló que en el caso de las personas que utilizan uñas postizas, al ser pegadas restan permeabilidad y favorecen la humedad en ellas, lo que condiciona la fácil reproducción de hongos o bacterias que actúan en favor de algunas enfermedades.

Manjarrez Aranda consideró que es poco habitual que la población, sobre todo del sexo masculino, se lave las uñas; sin embargo, el aseo de las manos debe incluirlas, para lo cual es necesario utilizar jabón y cepillo, juntar los dedos y poner las uñas directamente bajo el chorro del agua.

Para tener las uñas sanas, explicó, éstas no deben estar muy largas; en las manos se deben cortar de forma redonda, mientras que las uñas de los pies en forma recta, ya que pueden dar paso a la formación de uña enterrada o encarnada.

Advirtió que la higiene de las uñas de las manos no significa que deban lavarse constantemente, ni que se haga uso frecuente de gel o jabón antibacterial, ya que se puede provocar resequedad.

En el IMSS Morelos se promueven programas de salud en el área de Trabajo Social en cada Unidad de Medicina Familiar, con el objetivo de reforzar -a través de pláticas y orientación- la prevención de futuras enfermedades.