Encabezados por Lilia Ibarra Campos, presidenta de bienes comunales y ejidales de Ocuituco y ex diputada local, así como por Hilario Campos Domínguez, aseguraron que “el movimiento que dirige Irving Morales es impulsado detrás por personajes como el ex aspirante a la gubernatura del estado de Morelos en el 2012, Amado Orihuela Trejo, y sólo van en busca de beneficios personales”.
Reconocieron que efectivamente, “los tiempos de renovación de las estructuras del partido están rebasados, no sólo en lo que compete al presidente del Comité Directivo Estatal (CDE), también de consejeros, seccionales municipales y estatales, pero hay que respetar los lineamientos del dirigente nacional Enrique Ochoa Reza, quien en su reciente visita al estado pidió unidad”.
Incluso, Ibarra Campos mencionó que “hay duda en relación al origen de los recursos con los que se viene financiando a los inconformes que tienen tomadas las instalaciones del partido, se tendría que investigar la procedencia”.
Luego recordaron que algunas corrientes se han enquistado en el PRI desde hace más de 16 años, suelen tomar por asalto al instituto, para luego negociar las posiciones y han sabido vivir de esa manera porque ellos ganan perdiendo espacios.
Campos Domínguez admitió que “sí tenemos desconfianza por el hecho de que grupos de delincuencia organizada se comiencen a apoderar de las decisiones, para desde ahí llegar a otros niveles de gobierno, con la complicidad de supuestos compañeros que ya operan en dirección contraria”.
Y advirtieron que ya tienen elaborado un documento que harán llegar esta misma semana al líder nacional, en el que se pide una investigación sobre algunos priistas de dudosa reputación, entre ellos el propio Orihuela Trejo, Irving Morales y otros que han dado muestras de estar al servicio del gobierno estatal en turno y de su partido.
Entre las peticiones “y si hay elementos para ello, se exige su expulsión inmediata, antes de que sigan haciendo más daño”. En conclusión, abundaron, “podemos sostener que el CDE está infiltrado a través de quienes en su oportunidad se asumieron como militantes, pero que vendieron sus conciencias”, concretaron.