A diferencia de años anteriores, en los que se reportaron varias playas con altos índices de contaminación del agua, las instancias federales dieron a conocer que no hay riesgo. Pero destacaron que este reporte se realiza con base en el monitoreo de la calidad del agua que se lleva a cabo desde días previos al periodo vacacional.
Las dos dependencias revisan niveles de contaminación con estudios de laboratorio en muestras de las playas de afluencia turística de los 17 estados costeros de la República Mexicana.
La Cofepris informó -según las estadísticas- sobre las playas que el año pasado sobrepasaron los límites máximos permitidos de 200 enterococos (bacterias fecales) por cada 100 mililitros de agua y en 2016 arrojaron resultados dentro de la norma.
Por ejemplo, la playa La Principal, ubicada en Zihuatanejo, Guerrero, que en 2015 registró 870 enterococos, ahora reportó 25. Mientras que la playa Tlacopanocha, en el Puerto de Acapulco, pasó de 249 a 109 enterococos por cada 100 mililitros.
En el caso de Campeche, en Ciudad del Carmen, playa Norte que en 2015 tenía 856 enterococos, este año registró 14. Playa Norte II pasó de 880 a 10, Playa Zacatal de 677 a 20 y Playa Manigua de 464 a 14 enterococos por cada 100 mililitros de agua.
Este año se tomaron más de dos mil muestras en alrededor de 260 playas de destinos turísticos, entre el 19 de febrero y el 11 de marzo pasados.
Históricamente las playas más contaminadas de México fueron playa La Roqueta y playa Tlacopanocha, ubicadas en Acapulco, Guerrero, que en 2014 tuvieron un registro de dos mil 143 y mil 607 enterococos, pero que en la más reciente medición obtuvieron concentraciones de 36 y 109 por cada 100 mililitros de agua de mar.