Este martes el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) Morelos intervino de nueva cuenta el albergue “Amor para Compartir” y resguardó a 34 niños y niñas y jóvenes. El organismo informó que 19 de los menores que debían ser reubicados no se encontraron en el lugar y tres escaparon. La institución advirtió que el incumplimiento de una orden judicial, puede derivar en una responsabilidad de tipo penal contra los responsables de la casa hogar.

Desde temprana hora, personal del DIF y de otras dependencias como la Comisión para la Prevención de Riesgos Sanitarios, el Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas y un visitador de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Morelos, llegaron a las instalaciones del albergue ubicado en el municipio de Huitzilac, donde llevaron a cabo este martes un segundo proceso de aseguramiento de menores.

Esta es la segunda ocasión, pues el pasado 16 de febrero se dio a conocer el primer operativo en el que la Fiscalía General del Estado sacó –entre gritos y llanto- a 19 menores, como consecuencia de una carpeta de investigación por presunto maltrato y otras supuestas irregularidades que serían investigadas a fondo.

Este hecho provocó denuncias por parte de directivos de la casa hogar, quienes aseguraron que el conflicto tiene como origen algunas diferencias con el DIF Morelos. En su momento incluso denunciaron que se violó la suspensión provisional de un juzgado.
Ayer, en conferencia de prensa, la presidenta del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia en Morelos, Elena Cepeda de León, informó que regresaron por el resto de los menores, luego de que el Juzgado Primero de Distrito, con expediente de amparo 179/2016-9, ordenó el 17 de febrero que los menores fueran trasladados de manera inmediata y provisional a las instalaciones del organismo para su resguardo y atención, hasta que el centro de asistencia social "Amor para Compartir" subsane todas las recomendaciones que se le hicieron en una supervisión que hizo el mismo DIF.

De acuerdo con los datos de la institución pública, en la primera ocasión fueron llevados del albergue 19 menores, en esta segunda intervención 34 hombres y mujeres de entre los siete y los 22 años de edad, y tres escaparon. Además, hay 19 menores cuyos nombres fueron incluidos en la demanda de amparo –contra la presunta clausura- por la dirección del albergue, pero este martes no se encontraron y el personal del albergue no informó sobre su paradero.

Esta negativa a entregarlos con el pretexto de que algunos eran mayores de edad, advirtió Cepeda de León, implicaría un desacato de la orden judicial, por lo que podría haber responsabilidad penal y por lo tanto pedirán al juez de distrito que proceda contra la directora de la asociación, Lourdes Fuentes.
La presidenta insistió en que se procedió conforme a la legislación federal de protección a los menores, “no por una ocurrencia de la señora del DIF”.
Reiteró que en la supervisión hecha a la casa hogar se habían identificado supuestas irregularidades en las instalaciones del albergue, en cuanto a higiene en manejo de alimentos, faltas como el que los menores resguardados tenían padecimientos respiratorios; en la casa hogar estaban juntos niñas, niños y jóvenes mayores de edad, entre otras. Además, presuntamente, no contaban con expedientes clínicos y demás documentos de los infantes, ni con personal adecuado para su atención.

Elena Cepeda insistió en que albergues como éste operan con apoyos de la sociedad civil e incluso con organizaciones internacionales, por lo que llegan a convertirse “en un negocio”. 

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Pese a la resistencia de varios niños y adolescentes, un total de 48 menores fueron trasladados de la casa hogar “Amor para Compartir” en el municipio de Huitzilac al albergue del sistema estatal DIF en Temixco, en cumplimiento de una orden judicial.

Alrededor de las 7 de la mañana del martes, elementos de la Policía de Investigación Criminal y personal de la Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia, realizaron un operativo para trasladar a los menores al albergue estatal en cumplimiento del mandato del juez primero de distrito, que concedió la custodia provisional de los niños y adolescentes en tanto la casa hogar subsana una serie de requerimientos de la autoridad estatal.

Las niñas y los niños más pequeños fueron los primeros en ser subidos a las camionetas para su traslado, sin embargo los más grandes se resistieron. Algunos se encerraron o escondieron en los dormitorios y tres adolescentes (entre 14 y 17 años) decidieron saltar la malla ciclónica y huir, adentrándose en la zona boscosa de Montecasino. Horas más tarde, los tres menores fueron localizados y enviados con el resto de sus compañeros.

El operativo se realizó en ausencia de la directora del albergue “Amor para Compartir”, María de Lourdes Fuentes Hernández, y el representante legal Francisco Bahena Cárdenas. La Unión de Morelos intentó contactarlos vía telefónica, para conocer su opinión al respecto, pero ninguno contestó las llamadas.

El visitador de la Comisión de Derechos Humanos de Morelos (CDHEM), Cuauhtémoc Magdaleno, documentó el traslado de los menores, como parte de las diligencias que se realizan para la integración de la queja promovida por los responsables de la casa hogar contra actos del DIF. Al lugar también se trasladó el notario público Manuel Gándara, para dar fe de los hechos. El operativo duró varias horas y en total fueron trasladados de la casa hogar al DIF 48 menores.

El visitador de la CDHM manifestó que el organismo actuará con imparcialidad en la integración y resolución de la queja, atendiendo a cada uno de los argumentos que presente cada parte involucrada y sobre todo el interés superior de los niños y adolescentes.

Por lo pronto, solicitó a las autoridades contactar a los padres o tutores de los menores, para proporcionales información sobre la ubicación de sus hijos y el estado en el que se encuentran.

En relación a las presunciones de maltrato de menores dentro de la casa hogar, señaló que esa suposición “pudiéramos en un momento dado precisarlo a través de los dictámenes psicológicos y físicos que realice la autoridad, porque ese sería un elemento que nos pudiera dar jurídicamente, mediante un sistema escrito o bajo un argumento escrito, si hubiera algún tipo de maltrato de un menor”.

Inconsistencias en el número menores

La pugna entre “Amor para Compartir” y el Sistema estatal DIF desató también una preocupante guerra de cifras, en la que no queda claro cuántos menores estaban en la casa hogar y cuántos quedaron en total bajo la custodia de las autoridades.

Según los responsables de la casa hogar, en el establecimiento había 67 menores que llegaron

allí canalizados por el DIF o la fiscalía estatal, por internamiento voluntario por parte sus padres por ser de escasos recursos o provenientes de otros albergues.

El 15 de febrero la fiscalía ordenó el aseguramiento y traslado de 19 menores de la casa hogar al albergue del DIF, bajo la presunción de maltrato, falta de asistencia médica, alimentación inadecuada, carencia de servicios médicos y documentación para acreditar la identidad y procedencia de los niños y adolescentes.

Este martes, el DIF (en cumplimiento de una orden judicial) sacó de la casa hogar a los 48 menores restantes, cuyo número fue corroborado con base en un informe que la misma Procuraduría del Defensa del Menor y la Familia entregó ayer a la Comisión de Derechos Humanos. La sumatoria total es de 67 menores, que coincide con la versión de los responsables de la casa hogar.

En conferencia de prensa, la presidenta del DIF, Elena Cepeda, dio a conocer que la institución tenía asegurados a 34 (todos menores y al menos uno de 22 años). Con la localización de tres que intentaron huir, el número total sería de 37. Esta cifra no concuerda con los 48 enlistados en el informe de la Procuraduría del Menor.

Pero lo más preocupante es que la presidenta del DIF aseguró que en la casa “Amor para Compartir” había un total de 78 niñas, niños y adolescentes, de los cuales sólo 53 están bajo la custodia provisional de la institución, y que faltaban 19 menores que no aparecían, lo cual representaba una alerta. Pero las cifras dadas por la primera dama también fueron imprecisas, porque la sumatoria da un total de 72 menores y no 78, como afirmó.