El fiscal general del estado, Javier Pérez Durón, reconoció que la dependencia a su cargo entorpeció el reconocimiento de las víctimas del delito por parte de sus familiares, al no haber subido toda la información de los estudios hechos a los 118 cadáveres inhumados en una fosa común de Tetelcingo al sistema de Índice Combinado de ADN (Codis) de la Procuraduría General de la República (PGR).
Incluso, confirmó que estudios hechos a más de 40 cadáveres de los 118 inhumados en Cuautla se encuentran perdidos, por lo que la Fiscalía General del Estado tendrá que exhumar los cadáveres para volver a practicar los estudios correspondientes para su identificación.
"Vamos a hacer la exhumación correspondiente para que aquellos cuerpos que no cuentan con el perfil genético o que periciales no los tiene, no exista ninguna duda. Vamos a tomar el perfil genético de aquellos que no se cuentan, que son alrededor de 40, no los hemos encontrado. No sé si mañana (hoy) o pasado llegue el coordinador de servicios periciales o el genetista y me diga: 'licenciado, ya los encontré'. Aunque los encuentren, nosotros los vamos a hacer", dijo a los diputados.
Lo anterior lo manifestó ayer, durante el informe que presentó a los integrantes de la Comisión de Seguridad y Protección Civil del Congreso del estado, en la que confirmó que en próximos días se sancionará a los funcionarios públicos responsables de las irregularidades cometidas en la inhumación de más de 100 cadáveres en Cuautla, como parte de los resultados de las investigaciones que lleva a cabo la fiscalía especializada que se abrió para el caso.
A diferencia de la última comparecencia ante diputados para hablar sobre este caso, ayer Pérez Durón reconoció que se cometieron diversas irregularidades al inhumar los cuerpos, en su mayoría sin reconocer.
Tal es el caso que el fiscal informó a los diputados que la fosa común, por la que firmó un convenio la dependencia a su cargo, no contaba –ni cuenta– con todos los permisos para operar, por lo que han insistido al dueño en que se regularice lo antes posible. Aunque insistió en que no se trata de una fosa clandestina.
Dentro de las cifras que ofreció a los legisladores, el fiscal general destacó que 41 cuerpos no han sido reconocidos genéticamente, ya que se perdieron los resultados de los estudios o bien no se practicaron.
De igual forma, agregó que ocho cadáveres aún no tienen carpeta de investigación, mientras que el resto sí cumple con este requisito legal.
Como lo mencionó anteriormente, 64 restos fueron enviados de la zona central (Cuernavaca) a Tetelcingo, de entre los que se encuentra los ocho casos sin identificar y tres cuerpos que fueron donados a universidades (también sin identificar).
En tanto que 54 cadáveres corresponden a la zona oriente. Lo anterior suma un total de 118 cuerpos, de los cuales sólo dos ya fueron entregados a sus familiares.
Javier Pérez señaló que se hizo una clasificación de las carpetas: 26 murieron por enfermedad, cuatro por suicidio; por muerte violenta hay 41 carpetas, siete por accidentes o caídas, 12 por hechos de tránsito y de nueve no se tiene el motivo de muerte.
Otro dato importante es que de estos 118, 13 cadáveres corresponden a mujeres.
En dos semanas más, avances sobre caso Gisela: fiscal
Por otro lado, el fiscal general del estado adelantó a diputados locales que en una o dos semanas habrá resultados del resto de los implicados en el asesinato de la alcaldesa de Temixco, Gisela Mota Ocampo.
Dijo que ya se tienen identificados a otros presuntos responsables, aunque no quiso dar más información al respecto.